Una semana después de su última visita a Arequipa, un estado de Perú, el presidente Pedro Pablo Kuczynski volvió a la región, esta vez para supervisar obras y para el Tercer Gabinete Binacional con Colombia, que se realizará mañana.
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La última actividad que PPK tuvo hoy en la ciudad fue una en el distrito de Yura, donde revisó la instalación de servicios de agua potable y alcantarillado.
Durante su discurso, el presidente no solo se refirió a las obras, sino también a la corrupción en el país.
“Aquí no hay corrupción, nadie se mete un centavo al bolsillo, solo los trabajadores por su trabajo. Si no hubiera corrupción en el Perú del pasado, ya tendríamos agua potable en todo el país. Pero se llevaron la plata. Los vamos a colgar a todos. Los vamos a castigar a todos. Y a las empresas corruptas también”, afirmó el mandatario, sin referirse a ninguna compañía en específico.
Sin embargo, en una actividad realizada antes, en la visita a la planta de gas natural de Fenosa, en Cerro Colorado, PPK se había referido al Gasoducto Sur Peruano, que era operado por la constructora Odebrecht en consorcio con Enagas y Graña y Montero. Como se sabe, Odebrecht ha revelado que sobornó a funcionarios peruanos para ganar obras en el país entre los años 2005 y 2014.
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Con información de El Comercio de Perú
