Un grupo de eurodiputados pidió la renunciadel embajador cubano Alberto Navarro por enviar una carta a Joe Biden pidiendo retirar el embargo al país caribeño.
El Político
El embajador ante la Unión Europea tendrá que dar explicaciones por la carta que envió al presidente estadounidense, para pedirle que ponga fin al embargo sobre la isla.
El Alto Representante de la Unión Europea (UE) para Política Exterior, Josep Borrell, convocó al embajador de ese organismo en Cuba, el español Alberto Navarro confirmó una portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior.
Renuncia del embajador cubano
Eurodiputados enviaron a Borrell una carta en la que pedían la «inmediata destitución» de Navarro, el embajador cubano, por «defender el régimen castrista».
En ella, los eurodiputados criticaban al diplomático por haber firmado una carta, con fecha 9 de febrero, enviada al nuevo presidente de EE.UU.
"Navarro debe renunciar por solicitar el levantamiento del embargo estadounidense a la isla", alegan los eurodiputados del Partido Popular (PP) y del Grupo Popular Europeo, y grupos como Renew y ECR.
Disparatada iniciativa
Según los firmantes, esto «constituye un hecho grave en una línea de actuación totalmente desafortunada y errática sobre lo que debe ser la defensa de nuestros intereses y valores como unión de Estados democráticos y de derecho».
En la carta afirmaban, que el emnajador cubano Navarro había intentado que su «disparatada iniciativa» respecto a Biden fuera respaldada por representantes diplomáticos de otros países miembros de la UE.
Otros declinaron firmar
Varios eurodiputados dijeron «que declinaron firmar la misiva propuesta por el embajador».
«Diríase que nuestro embajador en La Habana toma posicionamientos políticos en consonancia con un régimen que no respeta ni defiende los derechos humanos", escriben los eurodiputados
"Se permite licencias más propias de un dirigente político que de un representante diplomático», escriben los populares españoles Dolors Montserrat, Esteban González Pons, Antonio López-Istúriz y Leopoldo López Gil.
Otros agravios
Miembros del PP español la carta del embajador cubano a Biden representa «un acto más en la larga lista de agravios que Navarro ha infligido.
Según los firmantes, el embajador cubano en la UE debe renunciar porque bloqueó la participación en una audiencia en la UE de los galardonados con el premio Sájarov.
También boicoteó y denegó el acceso a las instalaciones de la UE en La Habana a los premiados e invitados para participar telemáticamente en esa audiencia.
Piden la renuncia inmediata
Denuncian además que la presidenta de las Damas de Blanco, Berta Soler, quien recibió precisamente el Premio Sájarov en 2005, «no haya sido atendida» por el personal de la embajada europea en La Habana.
«Pese a las numerosas y periódicas detenciones de las que son victima tanto ella como los demás miembros de su organización»,aclaran
Es un indigno representante
Los firmantes de la carta consideran que el embajador cubano «no es digno de las altas funciones que ostenta y tiene encomendadas», por lo que piden a Borrell «su inmediata sustitución».
También pidió su reemplazo este viernes la vicepresidenta del Parlamento Europeo para América Latina, Dita Charanzová.
En una entrevista que había muchos problemas con el enfoque actual de la Unión Europea hacia Cuba. «Uno de ellos es el embajador en La Habana».
Navarro niega haber firmado la carta
Esta misma semana, Navarro negaba que en forma individual hubiera firmado ninguna carta dirigida a Biden.
Aceptó, sin embargo que se unió a la iniciativa de cientos de artistas e intelectuales que reclamaban el levantamiento de sanciones.
A lo que añadió que contaba con todo el apoyo del Alto Representante Josep Borrell y de su equipo.
Cuba no es una dictadura
La llamada de Bruselas se produce después de que CubaNet publicará una entrevista con el embajador cubano.
Habló de los encuentros en torno al Acuerdo de Diálogo político y Cooperación entre la UE y Cuba que tienen lugar estos días.
El diplomático negó de forma categórica que Cuba fuera una dictadura.
«No, yo no considero que Cuba sea una dictadura. Claro que no», aseveraba.
Afirmaciones que han sido ampliamente rechazadas, entre otras personas, por el director para las América de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco.
«Estas inadmisibles declaraciones dañan la credibilidad de los diálogos Cuba-Unión Europea sobre derechos humanos».