Elon Musk ofreció cancelar 46.500 millones de dólares, con lo cual obtuvo el control total de Twitter. Y lo hizo sin ningún plan sobre cómo iba a financiar y administrar la red social.
Mario Beroes/El Político
Una investigación del The New York Times‘, afirma que toda la operación del dueño de Tesla y SpaceX, nació de la más absoluta improvisación.
Musk apenas consultó a un muy reducido grupo, conformado por no más de diez personas que, además, suelen estar siempre de acuerdo con su opinión.
El interés de Musk en hacerse con el control de Twitter ha sido un misterio desde que realizó la primera oferta el pasado abril.
La red social del pajarito es una de las herramientas de comunicación más importantes del mundo; sin embargo, está realmente lejos de plataformas como Facebook, TikTok o Instagram.
Tanto en número de usuarios como en ingresos generados. Así lo demuestra el que la ‘app’ fundada por Jack Dorsey en 2016 arrastre pérdidas desde hace años.
¿Que le depara el futuro a la red social?
No está claro que se puede esperar de Twitter en el futuro, hasta los propios trabajadores de la plataforma son, actualmente, un mar de dudas.
Existen dudas sobre si habrá cambios en la dirección de la compañía e, incluso, existe el temor de que Musk decida prescindir de parte de la plantilla.
Según afirma ‘ The Guardian‘, el empresario no tomará ninguna decisión final antes de que tome el control total de la compañía.
Algo que, si no sucede nada fuera de lo común, debería ocurrir en los próximos meses.
Entre cifrado y pagos
Expertos en redes sociales y en comunicación han descartado de forma tajante, igual que lo ha hecho el propio Musk, que la adquisición de la red social nazca del interés del magnate en hacer negocio.
Aunque mejor es esperar, porque, el empresario estaría planeando revitalizar la aplicación antes de volver a sacarla a bolsa dentro de tres años.
Sea como fuere, por el momento el movimiento tiene más pinta de capricho y de búsqueda de poder que de cualquier otra cosa.
Los expertos en redes tampoco tienen claro cómo será la aplicación cuando esté bajo el control del magnate.
Lo cierto es que, más allá de vagas promesas sobre libertad de expresión y transparencia, Musk no ha realizado apenas anuncios concretos sobre los cambios que pretende realizar en la red social.
En los últimos días ha dejado caer que Twitter debería de comenzar a cifrar de extremo a extremo los mensajes directos entre usuarios con el fin de que sean más seguros.
También ha remarcado que no tiene planes de hacer que la ‘app’ comience a ser de pago para los internautas corrientes, aunque próximamente puede haber cambios para las cuentas de empresas e instituciones.
"Twitter siempre será gratuito para los usuarios ocasionales, pero quizás tenga un pequeño coste para los usuarios comerciales/gubernamentales", ha afirmado Musk en un reciente tuit.