En un documento de significación histórica sin precedentes, y en una decisión conjunta de los Dicaterios para la Cultura y el Desarrollo Humano Integral, El Vaticano renegó hoy de la denominada "Doctrina del Descubrimiento."
El Político
Dicha doctrina amparó desde el siglo XV la colonización de América y África, y repudió los "muchos actos de maldad" cometidos también por cristianos contra los indígenas.
"La ‘Doctrina del Descubrimiento’ no forma parte de la enseñanza de la Iglesia Católica", se defiende en un comunicado conjunto del Dicasterio (Ministerio Vaticano) para la Cultura y la Educación y el de Servicio del Desarrollo Humano Integral.
Por qué es importante
Durante su viaje a Canadá en julio del año pasado, los grupos indígenas de Quebec reclamaron al papa Francisco, el primer latinoamericano de la historia, que renegara de la Doctrina que, según el Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones indígenas, "sigue vigente".
Gracias a la ayuda de los pueblos indígenas, se emitió un documento que “la Iglesia ha tomado mayor conciencia de sus sufrimientos, pasados y presentes, provocados por la expropiación de sus tierras”, y “las políticas de asimilación forzada, promovidas por las autoridades de gobierno de la época, que buscaban eliminar sus culturas indígenas.”.
Bulas que aupaban los descubrimientos
Los descubrimientos y conquistas siempre tuvieron el favor de la Iglesia Católica, hasta el punto afirmarse que se realizaban con la cruz y la espada.
Por ejemplo, el papa Nicolás V con su bula "Dum Diversas" de 1452, otorgó "permiso pleno y libre" a la corona portuguesa para "capturar y subyugar sarracenos y paganos" en su expansión africana.
Mientras que el pontífice Alejandro VI bendijo con su bula "Inter Caetera" (1493), la llegada a América de los españoles, un año después del primer viaje de Cristóbal Colón, y estipuló el reparto de dominios, contendidos entre Castilla y Portugal.
Estos textos de los papas, auténticas autoridades supranacionales en la Era de los Descubrimientos, unidos al principio "terra nullius" (tierra de nadie), generaron un concepto jurídico que amparó la colonización, "el derecho exclusivo de extinguir el título o la posesión de dichas tierras por parte de las poblaciones indígenas".
Conclusión
La “Nota” conjunta de los Dicasterios para la Cultura y el Desarrollo Humano Integral señala que "muchos cristianos han cometido actos malvados contra los pueblos indígenas”.
Las bulas papales del siglo XV que concedieron a los gobernantes colonizadores los bienes de los pueblos originarios son documentos políticos, instrumentalizados para actos inmorales.
Ya en 1537 Pablo III declaró solemnemente que los indígenas no debían ser esclavizados ni despojados de sus propiedades
Ninguna duda cabe que esta decisión tomada hoy bajo la dirección que ciertamente nació en un Continente Descubierto, es una verdadera revolución eclesiástica.