Autoridades fiscales y policiales allanaron el domicilio del expresidente Mauricio Funes, primer gobernante de izquierda que ejerció entre 2009 y 2014, para buscar indicios y pruebas en una investigación que se le sigue desde 2015 por presunta corrupción.
Desde hace más de 72 horas la Fiscalía General de la República (FGR), se encuentra allanando residencias y oficinas del empresario Miguel Menéndez, amigo de Funes, para también buscar pruebas de presunta corrupción.
“Estamos haciendo un registro de la casa, y por lo que hemos encontrado, podemos decir que es la que utiliza de residencia el señor Funes, en busca de pruebas sobre la investigación que se le sigue”, dijo a la prensa el fiscal de casos de corrupción, Andrés Amaya.
El expresidente Funes no se encuentra en El Salvador, pero ha dicho que “todo se trata de un show mediático de la derecha”.
A Funes se le investiga por presunto enriquecimiento ilícito y por armas de todo tipo que han localizado en su domicilio. El fiscal Amaya aseguró que investigarán las armas para determinar su legalidad.
“¿Armas de colección y sables obsequiados por la Fuerza Armada cuando fui su comandante general es delito, según FGR?”, preguntó Funes en Twitter.
En los últimos años, tres expresidentes han estado en la mira de la justicia por casos de corrupción: el ya fallecido Francisco Flores (1999-2004); Antonio Saca (2004-2009) y Funes (2009-2014). Hasta el momento ninguno ha sido condenado.
DEFENSOR ACÉRRIMO
Por su parte, el presidente Salvador Salvador Sánchez Cerén salió en defensa de su antecesor, al que elogió por su trabajo en beneficio de los sectores más pobres del país. Dijo que Funes se propuso levantar la economía de El Salvador y en cinco años logró un gran crecimiento económico”.
Sánchez Cerén sostuvo que la forma de gobernar de Funes provoca inconformidades de grupos de poder, y “hay mucha venganza de sectores y de partidos que quieren aprovechar esta situación”.
Con información de Excelsior