El Kremlin reconoció que un ataque ucraniano golpeó con tal dureza a las fuerzas militares que ocupan la región oriental de Donetsk que acabó con la vida de 63 soldados rusos.
El Político
Un dato a considerar es que Moscú tuvo que reconocer este lunes que había sufrido pérdidas de vidas, algo que raramente hace.
“Como resultado del alcance de cuatro misiles con cabezas de alta explosividad en un punto de despliegue temporal, murieron 63 militares rusos", señala el Ministerio de Defensa ruso en un raro comunicado.
En contexto
El ataque tuvo lugar en la ciudad de Makiivka, ubicada en la provincia oriental de Donetsk, desde hace meses controlada por las fuerzas rusas. Moscú no reportó cuándo se produjo, pero las autoridades militares ucranianas aseguran que el ataque se llevó a cabo el 31 de diciembre.
Y aunque Rusia habla de 63 soldados muertos por el ataque ucraniano con el sistema lanzamisiles estadounidense HIMARS, según Kiev son muchos más, reportó Univision.
Entre líneas
Los ucranianos escribieron en Facebook que “Papá Noel empacó 400 cadáveres de cerdos rusos”, además de más de 300 heridos. No ha sido posible confirmar alguna de estas cifras de forma independiente.
También entre los blogueros militares rusos se habla de varios cientos de fallecidos en el ataque de Makiivka.
El antiguo líder separatista ruso Igor Strelkov dijo que recibió un reporte de los hechos alrededor de la 1:00 de la mañana del 1º de enero (22:00 GMT del 31 de diciembre).
Según Strelkov, “cientos” de soldados rusos murieron o resultaron heridos. Agregó que el ataque ucraniano alcanzó una instalación que albergaba tropas movilizadas.
Ucrania está utilizando armas sofisticadas suministradas por Occidente para ayudar a derribar los misiles y drones lanzados por Rusia, así como para enviar fuego de artillería a las áreas del país controladas por las fuerzas de Moscú, como el de Makiivka.
En conclusión
El mando ucraniano reconoció haber bombardeado hasta 10 vehículos y un número indeterminado de militares en Makiivka y asegura que el ataque se llevó a cabo el 31 de diciembre.
"Se están aclarando las pérdidas en términos de personal para los ocupantes", detalló el Estado Mayor en Facebook. Unas horas antes, Ucrania elevó el número de muertos a 400.
El anuncio de estas pérdidas provocó críticas hacia el comando militar ruso, acusado por el exresponsable separatista Igor Strelkov de haber almacenado munición en el edificio desprotegido.
Lo cierto es que Rusia continúa lanzando drones explosivos contra la infraestructura eléctrica de Ucrania en su estrategia de desgaste de la resistencia ucraniana a su invasión.
El bombardeo nocturno de la madrugada de este lunes fue el más reciente de una serie de incesantes ataques entre los que se incluye uno que mató a tres civiles en la víspera de Año Nuevo.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, dijo el lunes que 40 drones fueron dirigidos contra la capital durante la noche. Todos ellos fueron destruidos, según las fuerzas de defensa aérea.
Klitschko dijo que 22 drones fueron destruidos en la capital, tres en la región periférica y 15 en las provincias vecinas.
“Terrorismo energético”
Las instalaciones de infraestructura energética resultaron dañadas como resultado del ataque y se produjo una explosión en un distrito de la ciudad, dijo el alcalde. No quedó claro de inmediato si eso fue causado por drones u otros tipo de munición.
Un joven de 19 años fue hospitalizado, agregó Klitschko, y se estaban produciendo cortes de energía de emergencia en la capital.
Rusia ha llevado a cabo ataques aéreos contra los suministros de agua y energía de Ucrania casi semanalmente desde octubre.
En ese contexto, el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenski, acusó a Rusia de “terrorismo energético”, ya que los bombardeos aéreos han dejado a muchas personas sin calefacción en medio de las gélidas temperaturas que acompañan el inicio del invierno.
Funcionarios ucranianos dicen que Moscú está “convirtiendo el invierno en un arma” en su esfuerzo por desmoralizar a la resistencia ucraniana.
En los seis meses desde que Rusia ocupó gran parte del este de Ucrania, la guerra ha estado dominada por un duelo de artillería en la que los defensores ucranianos se han visto a menudo superados.