Del informe redactado por el fiscal especial Robert Mueller lo que más parece haber impactado a la opinión pública es que el presidente Donald Trump trató de destituirlo del caso. Esa información parece opacar que el primer mandatario fue exonerado de haberse aliado con Rusia para ser favorecido en los comicios presidenciales de 2016.
Por Redacción El Político
Según el relato del documento realizado por Mueller se desprende que Trump se extralimitó en sus deberes al tratar de imponerse frente a varios funcionarios de su gabinete para sacar al abogado especial de su caso. Sale a relucir que muchos se negaron a seguir las órdenes del primer mandatario en ese sentido.
Entre los que no cumplieron sus requerimientos se encuentra un abogado de la Casa Blanca que renunció antes de sacar al fiscal especial y un asistente que se desentendió de la solicitud . Explicó Mueller que estos hechos acaecían en reuniones privadas donde el presidente trataba de usar su poder para influir en sus empleados.
Parece que esta investigación evidenció la poca voluntad de Trump por seguir las reglas gubernamentales y resistir los límites legales y políticos.
Sobre la investigación, el presidente y sus consejeros han hecho énfasis en el hecho de que después de dos años de pesquisas no hubo cargos criminales para él, ni por obstrucción a la justicia así como tampoco por conspirar con Moscú para ganar los comicios de 2016.
Cabe destacar que el ex presidente de la campaña Paul Manafort y el ex asesor de seguridad nacional Michael Flynn se declararon culpables, pero no se imputó a nadie por confabularse con Rusia.
En cuanto a los demócratas se desconoce cómo van a actuar ahora. Seguramente algunos parlamentarios seguirán presionando para que se haga un juicio político, pero ciertos legisladores -de este sector- no creen que se genere esta situación. Por lo pronto,el presidente del Poder Judicial de la Cámara de Representantes, Jerrold Nadler, pidió que Mueller sea testigo frente a su comité en unos días.
Pero realmente lo que llama poderosamente la atención es conocer hasta dónde puede llegar Trump para hacer lo que se le antoje y obligar a sus colaboradores a que lo respalden.
Para Adam Schiff, presidente demócrata del comité de inteligencia de la Cámara de Representantes, el comportamiento del presidente puede considerarse deshonesto, poco ético, inmoral y antipatriótico.
En otras áreas de su gobierno, Trump también ha intimidado legalmente, como cuando ordena a sus asesores de inmigración que tomen acciones que consideran ilegales contra las personas que solicitan asilo. Cuando no siguieron sus preceptos decidió examinar a los integrantes del Departamento de Seguridad Nacional.
Hallazgos del informe de Mueller
Uno de los hechos que más ha llamado la atención de la opinión pública fue cuando el presidente de los Estados Unidos le exigió al Abogado de la Casa Blanca Don McGahn que llamara al Vice Fiscal General Rod Rosenstein, quien inspeccionaba la pesquisa, para que despidiera a Mueller del caso por supuesto "conflictos de intereses". McGahn se negó y renunció antes de provocar un problema mayor.
La otra acción relevante fue cuando Trump intentó parar la pesquisa a través del ex jefe de su campaña Corey Lewandowski, diciéndole que le enviara un mensaje al fiscal general Jeff Sessions para que se pronunciara sobre el caso llamándole "muy injusto." Lewandowski no llevó el mensaje, luego se lo solicitó al funcionario de la Casa Blanca, Rick Dearborn, quien tampoco cumplió su solicitud.
La historia de este intenso caso continuará.
Fuente: apnews.com