Raúl Rodríguez dice que nunca olvidará el momento en que se dio cuenta de que su vida en EEUU estaba construida sobre una mentira.
El Político
Todo comenzó en abril de 2018, cuando los investigadores federales le mostraron un documento impactante: un certificado de nacimiento mexicano con su nombre.
Una conversación con su padre poco después confirmó lo que Rodríguez había temido tan pronto como vio el papeleo. El certificado de nacimiento estadounidense que había usado durante décadas era fraudulento. Rodríguez no era ciudadano estadounidense. Era un inmigrante indocumentado.
Agente de la CPB en EEUU
Rodríguez dice que no tenía idea de que había nacido en México antes de la confesión de su padre ese día, pero supo de inmediato cuán grave era la situación. Había pasado casi dos décadas trabajando para el Gobierno de Estados Unidos en la frontera.
Según sus estimaciones, ayudó a deportar a miles de personas mientras trabajaba para la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU (CBP, por sus siglas en inglés) y, antes de eso, para el Servicio de Inmigración y Naturalización. De repente, se encontró en el extremo opuesto del espectro, luchando por la oportunidad de quedarse en Estados Unidos.
Perdió mucho muy rápido después de eso: su trabajo en CBP, sus amigos en la policía, su sentido de sí mismo. No ha visto a su padre desde ese día en abril de 2018 y dice que no quiere volver a hablar con él nunca más.
Vivió una pesadilla
Pero ahora, casi cinco años después, Rodríguez, de 54 años, dice que se da cuenta de que también ganó algo sorprendente después de ese momento en que supo que no era ciudadano estadounidense.
“Empezó como una pesadilla”, dice. “Pero luego resultó ser, santo cielo, esto es lo que estaba destinado a hacer”.
Para Rodríguez, un viaje comenzó ese día. Y terminó en algún lugar que no esperaba.
Ayuda tras conocer su verdadera historia
Al principio, Diane Vega no podía creer las palabras que vio en su feed de Facebook.
En su trabajo de defensa ayudando a los veteranos deportados y a los veteranos en riesgo de deportación como vicepresidenta de Repatriate Our Patriots (Repatriar a nuestros patriotas, en español), había visto de primera mano cuán cruel y confuso puede ser el sistema de inmigración de EE.UU. Pero esta era diferente a cualquier historia que hubiera escuchado antes: "Alguien que pensó que había nacido aquí, que se crió aquí, que sirvió en el Ejército y luego a quien le dijeron: ‘no eres estadounidense'".
¿Y cómo, se preguntó, podría alguien que había trabajado para la CBP enfrentar la deportación?
Vega, quien reside en El Paso, Texas, no fue la única sorprendida por la historia del exinspector de inmigración que se enteró de que era indocumentado. La difícil situación de Rodríguez llamó la atención de los medios locales y nacionales.
Muchas respuestas a la cobertura fueron poco comprensivas, dice Vega, especialmente en las comunidades fronterizas.
Lee la historia completa en CNN.