Pese a la extensa actividad terrorista, los líderes del Estado Islámico preparan en silencio a sus seguidores para el futuro colapso del ‘Califato’, autoproclamado con bombos y platillos hace dos años.
Pese a su incesante y extensa actividad terrorista, los líderes del Estado Islámico preparan a sus partidarios para la derrota del ‘Califato’ autoproclamado hace dos años, informa ‘The Washington Post’.
Dirigentes del EI han afirmado en sus más recientes mensajes públicos la posibilidad de que sus fortalezas restantes podrían caer.
Al mismo tiempo, el grupo ha prometido continuar con su reciente campaña de violencia, incluso si debe actuar desde la clandestinidad. En ese sentido, expertos estadounidenses en contraterrorismo creen que los ataques masivos que en el último mes se han cobrado numerosas víctimas en Estambul y Bagdad, han sido en gran parte una respuesta a los reveses militares en Irak y Siria.
Los actos de terrorismo podrían continuar e incluso intensificarse, al menos inicialmente, según los analistas, ya que el grupo evoluciona desde un cuasi Estado con posesiones territoriales a una red clandestina de terrorismo difundida en forma de ramas y células en al menos tres continentes.
De hecho, mientras que la inminente pérdida de su santuario físico constituiría un duro golpe para el Estado Islámico, limitando seriamente, por ejemplo, su capacidad de recaudar dinero, entrenar reclutas o planificar sofisticadas operaciones terroristas, la naturaleza altamente descentralizada del grupo augura que el grupo seguirá siendo peligroso durante mucho tiempo, afirman funcionarios y expertos en terrorismo citados por ‘The Washington Post’.
"Mientras nuestra estructura de núcleo en Irak y Siria se encuentra bajo ataques, hemos sido capaces de expandir y trasladar algunos de nuestros comandos, medios de comunicación y activos a otros Estados", sostuvo vía internet un portavoz del grupo terrorista.
"Tenemos todos los días personas que aseguran que desean venir al Califato", agregó el portavoz del EI al hablar con un periodista occidental con la condición de que su nombre y ubicación física no sean revelados. "Pero les decimos que se queden en sus países y que esperen para hacer algo allí", concluyó.
Con Información de ActualidadRT