“La querida Amazonia se muestra ante el mundo con todo su esplendor, su drama, su misterio”. Así comienza la Exhortación apostólica post-sinodal, Querida Amazonia. Sin embargo, en su afán por preservr el llamado pulmón del mundo, Francisco enfrenta a sectores tradicionales que piden un cónclave para sacarlo, trans insinuar en que los caciques de la zona, que son casados puedan ser sacerdotes católicos.
El Político
La polémica no se acaba con el matrimonio, o la ordenación de monjas misioneras, el coloquial encuentro con el expresidente Lula Da Silva en su residencia hotel de Santa Marta, también despertó recelos de quienes lo acusan de comunista, ante lo que suele responder: ""son los comunistas quienes se copiaron el mensaje de los cristianos".
El documento del Papa, distinto a las conclusiones del Sínodo sobre Amazonía del año pasado, está lleno de referencias a documentos de las Conferencias Episcopales de los países amazónicos, pero también a poemas de autores relacionados con la Amazonia y hace hincapié en que desea “expresar las resonancias” que el Sínodo ha provocado en él
.El documento traza nuevos caminos de evangelización y cuidado del ambiente y de los pobres. Francisco desea un nuevo impulso misionero y alienta el papel de los laicos en las comunidades eclesiales. Destaca que “un verdadero planteo ecológico” es también un “planteo social” y, si bien aprecia el “buen vivir” de los indígenas, advierte contra el “conservacionismo” que solo se preocupa por el medioambiente.
Los pueblos originarios, advierte, sufren el “sometimiento” tanto de los poderes locales como de los externos. Para el Papa las operaciones económicas que alimentan la devastación, los asesinatos, la corrupción, merecen el nombre de “injusticia y crimen”. Y con Juan Pablo II reitera que la globalización no debe convertirse en un nuevo colonialismo.
Exhorta el “encuentro intercultural” y afirma que incluso las “culturas supuestamente más evolucionadas”, observa, pueden aprender de los pueblos que “desarrollaron un tesoro cultural estando enlazadas con la naturaleza”. La diversidad, por lo tanto, no es “una frontera”, sino “un puente”, y dice no a un “indigenismo completamente cerrado”.
El tercer capítulo tiene un profundo sentido poético. se relaciona más inmediatamente con la Encíclica Laudato si’. En la introducción se destaca que en la Amazonia existe una estrecha relación del ser humano con la naturaleza.
Afirma que l cuidado del medioambiente y el cuidado de los pobres son “inseparables”. Francisco, entonces, vuelca su atención al “sueño hecho de agua” . Cita a Pablo Neruda y a otros poetas locales sobre la fuerza y la belleza del río Amazonas.
Para el Papa, es urgente escuchar “el grito de la Amazonia” . Recuerda que el equilibrio planetario depende de su salud. Hay, escribe, fuertes intereses no solo locales, sino también internacionales. La solución, por lo tanto, no es la “internacionalización” de la Amazonia, sino que debe crecer “la responsabilidad de los gobiernos nacionales”. El desarrollo sostenible, continúa, requiere que los habitantes estén siempre informados sobre los proyectos que les conciernen y espera la creación de “un sistema normativo” con “límites infranqueables”.
El polémico capítulo 5
El Papa invita a “desarrollar una Iglesia con rostro amazónico”. Estos pueblos tienen “derecho al anuncio del Evangelio”, de lo contrario “cada estructura eclesial se convertirá” en una ONG.
Con la pobreza de tantos habitantes de la Amazonia, la inculturación debe tener un “perfume marcadamente social”. Plantea la necesidad de llevar sacramentos accesibles a todos, especialmente a los pobres, “puntos de partida para una santidad amazónica” (77-80) que no deben copiar “modelos de otros lugares”.
Dice que “es posible recoger de alguna manera un símbolo indígena sin calificarlo necesariamente de idolatría”. Se puede valorar, añade, un mito “cargado de sentido espiritual” sin considerarlo necesariamente “un error pagano”.
Recuerda, en una nota al texto, que en el Sínodo “surgió la propuesta de elaborar un rito amazónico”. Los sacramentos, exhorta, “deben ser accesibles, sobre todo para los pobres”. La Iglesia, enfatiza recordando a Amoris laetitia, no puede convertirse en una “aduana”.
¿Cómo, entonces, “asegurar ese ministerio sacerdotal” en áreas remotas? Francisco exhorta a todos los obispos, especialmente a los latinoamericanos, “a ser más generosos”, orientando a aquellos que “muestran vocación misionera” a elegir la Amazonia y los invita a revisar la formación de los sacerdotes.
Reconoce que en la Amazonia algunas comunidades se han mantenido solo “gracias a la presencia de mujeres fuertes y generosas”. Sin embargo, advierte que no se debe reducir “la Iglesia a estructuras funcionales”. Si este fuera el caso, de hecho, solo se les daría un papel si tuvieran acceso al Orden Sagrado. Para el Papa la clericalización de la mujer debe ser rechazada, ordenas monjas en el sacerdocio es uno de los temas más polémicos.
Lula con el Papa
El tema de la amazonía formó parte del diálogo de m{as de una hora de la visita del Lula da Silva al Papa.
El ex presidente brasileño visitó el jueves al Pontífice, en lo que fue su primer viaje al extranjero tras salir de prisión en noviembre El Papa Francisco ha agradecido al ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva su visita al Vaticano el jueves y ha expresado su satisfacción por poder verle "caminando por la calle" tras su salida de prisión en noviembre.
"Le agradezco su gesto de venir, se lo agradezco mucho, y estoy contento de poder verlo caminando por la calle", dijo en español el Pontífice argentino, a lo que Lula da Silva respondió con un "gracias",
Los dos se reunieron por primera vez el jueves en la residencia del papa, Casa Santa Marta, en el Vaticano, en un encuentro de una hora de duración en el que abordaron temas como las desigualdades, la lucha contra el hambre o el medio ambiente.
El ex presidente brasileño regaló al Papa una fotografía de un indígena de la Amazonía, una región a la que el Papa dedicó el último Sínodo de Obispos y su última exhortación apostólica, y éste obsequió a Lula con un rosario bendecido.
El clero brasileño pide cambios
El Cardenal Claudio Hummes, Presidente de la Comisión Episcopal para la Amazonía y la Red Eclesial Pan-Amazónica – REPAM. Desde esta perspectiva, invocaba al Espíritu "para que nos ilumine, nos guíe y genere en nosotros una alegría evangélica", insistiendo en que "es importante que realizamos este encuentro con valentía y pasión", recordando las palabras del Papa Pablo VI, "Cristo apunta para la Amazonia".
Los pueblos indígenas, los ribereños, los pueblos tradicionales, pues ellos son los principales protagonistas de este Sínodo, y nosotros queremos escucharlos con mucho respeto y con mucha sensibilidad pastoral, dijeron los obispos del Brasil, sin embargo, en la tradición de la Iglesia romana estas palabras provocaron rechazo y una crisis que llegó hasta el asistentes del Papa Benedicto XVI.
Francisco reasigna funciones en el Vaticano
El histórico secretario privado de Benedicto XVI, monseñor Georg Gänswein, está en el punto de mira en el Vaticano. Pero durante las últimas semanas se ha esfumado del Vaticano. Su ausencia al lado del Pontífice en varias de sus audiencias, como cuando el papa argentino recibió al vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, y al presidente argentino Alberto Fernández ha despertado muchas preguntas.
Desde el pasado 15 de enero, la última vez que acudió a la tradicional audiencia de los miércoles, apenas se le ha visto en público, pese a que algunas personas dicen haberlo visto pasear por los jardines del Vaticano junto a Joseph Ratzinger. La desaparición coincide con la polvareda que causó en la Santa Sede el libro sobre el celibato publicado por el cardenal ultraconservador Robert Sarah, tras la solicitud de incorporar a sacerdotes casados en el Amazonas, supuestamente con la colaboración del papa Benedicto, que después tuvo que retirar su firma a petición del propio Gänswein.
Algunos medios alemanes, como el católico Die Tagespost, han publicado que el Papa ha concedido un permiso laboral indefinido a Gänswein, sin aclarar si ha sido decisión del mismo arzobispo o bien una manera que ha encontrado Francisco de apartarlo como un castigo por haber gestionado mal el asunto del libro de Sarah.
Cuando el secretario privado forzó a Sarah a retirar la firma de Ratzinger del libro, hubo quien, dentro de esta oposición ultraconservadora, le acusó de manipular al papa emérito.
Fuentes oficiales en el Vaticano han negado que Gänswein se encuentre de permiso laboral indefinido, pero han reconocido que su ausencia en las audiencias en las últimas semanas se debe a una “redistribución ordinaria” de sus varias funciones como prefecto de la Casa Pontificia, hastá allá llegaron las aguas del Amazonas.