“Es un cuerpo especializado para cuidar autoridades como tiene Estados Unidos” declaró este sábado Rafael Correa, a propósito de la una nueva medida de seguridad que busca la protección de funcionarios estatales como el presidente.
Aprobada el miércoles por el Parlamento ecuatoriano, el servicio de seguridad, dependerá del ministerio del Interior y estará integrado por civiles con conocimientos de normas de emergencia, protección, defensa personal, manejo de armas y especializados para tratar a los ciudadanos.
Por su parte, la oposición considera que el organismo de seguridad civil será usado para “perseguir” a los detractores del gobierno, y argumenta que la Constitución impide formar una “organización armada” al margen de la fuerza pública.
Correa, en el poder desde 2007, dejará el cargo el 24 de mayo, cuando asumirá el exvicepresidente oficialista Lenín Moreno para un período de cuatro años.