Oficialmente ya se terminaron las labores de búsqueda de víctimas, luego de que el huracán Ian golpeara con furia el estado del Sol.
Gustavo Márquez / El Político
El final del mes de septiembre fue devastador para Florida. La visita del huracán Ian dejó una profunda huella de destrucción y muerte. Y las autoridades se han abocado a la tarea de buscar víctimas y hacer un recuento de las pérdidas humanas y materiales. Y esta labor ya concluyó, al menos en una primera etapa.
Sin embargo no hay un antes y un después de estas labores, marcadas con una línea divisoria. Queda mucho por descubrirse todavía, mientras sigan transcurriendo los días, meses y hasta años. Pues la dimensión de los destrozos todavía puede estar ocultando más problemas.
Uno de los logros que destacan en los últimos días, es el haber podido restaurar el servicio eléctrico, en más de 2,5 millones de negocios y hogares en todo el estado. A pesar de que, paradógicamente, muchos ciudadanos ya no tienen vivienda, o quedaron parcialmente destruidas.
?? 42 mil personas trabajaron para recuperar la energía de más de 2.5 millones de hogares y negocios en #Florida tras el paso del huracán #Ian.
? La búsqueda de víctimas está prácticamente finalizada, según reporta la agencia AP.
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— Noticias EstrellaTV (@NEstrellaTv) October 11, 2022
Lo que han dicho las autoridades
Por su parte, Ron DeSantis, máxima autoridad en el estado del Sol, ha elogiado las labores de su equipo de gobierno, en todas las actividades a las que se han abocado, que han permitido restaurar el servicio de agua potable, el alumbrado eléctrico, así como la construcción de un puente provisional en Pine Island. Pero todavía hay mucho por hacer. Queda un inmenso cúmulo de escombros para recoger, en medio de un contexto de muchas pérdidas materiales.
El gobernador comentó, además, que: "la hoja de ruta para los próximos meses en el suroeste de Florida puede provenir del Panhandle de Florida, donde el huracán Michael —de categoría 5— arrasó con México Beach y gran parte de la ciudad de Panamá en 2018. Se traerá a los líderes de la ciudad de Panamá, para ofrecer consejos sobre la limpieza".
Y agregó que: "los panameños se van a bajar al terreno, van a inspeccionar y luego van a ofrecer algunos consejos a los funcionarios locales, aquí en el condado de Lee, Fort Myers Beach y otros lugares. Puedes hacer lo que quieras. No tienes que aceptar sus consejos. Pero les digo que fue un gran, gran esfuerzo".
Termina búsqueda de víctimas tras huracán Ian y comienza la reconstrucción
Un ejército de 42.000 trabajadores de servicios públicos ha restaurado la electricidad en más de 2,5 millones de empresas y hogares en Florida desde el azote del huracán Ian.https://t.co/Yug1QbanjB pic.twitter.com/Vq8un2CDuZ
— Actualidad 1040AM (@ActualidadRadio) October 11, 2022
En Resumen
Florida es el destino por excelencia de los jubilados. Y muchos de ellos ahora se encuentran al final de sus vidas, sin viviendas, sin pertenencias, sin esperanza. Estos pobladores de la tercera edad tienen más dificultades para recuperarse psicológicamente de lo sucedido. Hasta el punto de que dos adultos mayores, de 70 años, acabaron con sus vidas, al verse en la calla, sin nada, en medio de la destrucción total de su entorno.
En efecto, el paso del huracán Ian deja a los pobladores de Florida con problemas adicionales, sobre todo a nivel emocional. Por lo que el soporte de profesionales de la orientación, ayuda psicológica y/o psiquiátrica, es vital para poder asumir un proceso de reconstrucción, que debe ir más allá de lo material, que toque lo más sensible del ser humano, sus afectos y esperanzas, en el contexto de una tragedia de esta magnitud, donde el conservar la vida es lo primordial.
Esta historia de dolor y luto se va a repetir. Desafortunadamente, los huracanes seguirán viniendo a Florida. Pero depende de los pobladores y las autoridades estar mejor preparados, contar con mejores sistemas de pronósticos, con un cono de incertidumbre cada vez más preciso, así como planes de contingencia más robustos e infraestructuras que sean capaces de resistir más, frente a una naturaleza embravecida. Igualmente, reducir la posibilidad de que se siga construyendo en zonas cercanas a las costas. Y planificar urbanísticamente los nuevos desarrollos en zonas más elevadas, que representen menos riesgos para la población en general.