Luego de escucharse este martes en el Senado de los Estados Unidos los testimonios de los jefes de Seguridad del Capitolio Federal respecto a los acontecimientos del 6 de enero, ahora los legisladores procuran hallar lo que denominan la "hora perdida”. Y que no es más que la determinación del momento de una llamada telefónica que solicitó la intervención de agentes de la Guardia Nacional para sofocar el asedio de los seguidores del ex mandatario Donald Trump.
El Político
Los representantes del Comité de Seguridad del Senado se proponen determinar la razón por la cual se hizo incontenible la tromba humana que inusitadamente manifestó en el interior y las adyacencias del Capitolio el 6 de enero. Y precisar también las razones por las cuales la Guardia Nacional demoró tanto en llegar al lugar de los acontecimiento que derivaron en los fallecimientos de cinco personas, algunos heridos y cuantiosos y costosos destrozos de la propiedad federal.
Conforme a la cadena UNIVISION, se intenta determinar cómo ocurrieron los hechos. Y quién y en qué momento telefoneó para solicitar la intervención de la Guardia Nacional, que al fin de cuentas logró controlar el desorden.
El Comité senatorial lo preside la demócrata Amy Klobuchar. Junto al resto de los integrantes escuchó e interrogó a los principales jefes de la seguridad legislativa. Klobucha declaró: "Necesitamos respuestas. Esto nunca volverá a suceder".
Today Senator Peters and I are chairing the first Senate hearing on the Capitol insurrection. We need answers. This can never happen again. pic.twitter.com/QDQlFNcQDM
— Amy Klobuchar (@amyklobuchar) February 23, 2021
Acudieron a la audiencia el jefe de la Policía Metropolitana de Washington DC, Robert Contee. Seguidamente el ex jefe de la Policía del Capitolio Steven Sund. Y los ex jefes de seguridad de ambas cámaras del Congreso (sargent in arms), Paul Irving, de Representantes, y Micheal Stenger, del Senado. Tanto Sund, como Irving y Stenger renunciaron a sus cargos después de los acontecimientos.
Senado investiga el asalto al Capitolio tratando de determinar por qué no se pudo contener a la turba y por qué tardaron tanto en llegar los refuerzos.https://t.co/gFsuj6le8Y
— Univision Noticias (@UniNoticias) February 23, 2021
Desavenencias sobre la “hora perdida”
Durante la audiencia los dos jefes de seguridad del Capitolio manifestaron diferir uno del otro en relación con el uso de las comunicaciones mientras se consumaba el asedio. Mientras, en su cuenta en Twitter, DC Police Departament asegura que el 6 de enero, sus miembros respondieron al llamado de servicio para proteger y defender la democracia.
On January 6th, MPD members responded to the call for service to protect and defend our democracy. https://t.co/lgLws1zpbV
— DC Police Department (@DCPoliceDept) February 23, 2021
De un lado Irving aseguró que no era su obligación transmitir a los superiores la decisión de procurar la presencia de la Guardia Nacional. Con antelación Sund declaró lo contrario. Y se especula por parte de los conservadores que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, no activó el mecanismo porque estaba preocupada por el mensaje que enviaría sobre la militarización del recinto federal.
Increpado Irving sobre si estaba obligado a esperar la aprobación del liderazgo parlamentario para tomar una decisión al respecto, respondió “absolutamente no”.
Irving insistió en que no recordaba la hora exacta cuando Sund hizo la llamada, que este aseguró fue a la 1:09 pm en presencia de tres asistentes. Y la secundó otra a la 1.22 pm para hacer seguimiento al requerimiento. Sin embargo Irving indicó que la conversación se hizo a la 1:28 pm. En ese momento Sund le dijo que “él podría estar haciendo el pedido más tarde”.
Fuente: UNIVISION