La Cruz Roja ha instalado un campamento para evacuados en el municipio italiano de Visso, próximo al epicentro de los últimos terremotos que han azotado el centro del país, y se prepara para un aumento de las llegadas.
El presidente de la Cruz Roja local de Visso, Ussita y Castelsantangelo, Giovanni Cassoni, explicó a Efe que en el campamento actual se alojan entre 250 y 300 personas, si bien espera que la cifra aumente hasta 600 o 700 en las próximas horas.
De cara a esta situación, Cassoni ha asegurado que el campamento tiene capacidad para asistir a la mitad de estas personas, aproximadamente, y que por esa razón se está trabajando con otras autoridades para trasladar al resto a refugios de la costa este.
El campamento está conformado por unos barracones y tres tiendas de campaña con capacidad para cuarenta personas cada una de la Cruz Roja y del Ejército italiano y en él se alojan mujeres, hombres, niños y ancianos de los municipios afectados por el seísmo.
Se ubica en el mismo lugar en el que se asentó un -ya clausurado- campamento para dar asistencia primaria a los afectados por el devastador terremoto del pasado 24 de agosto, solo que según Cassoni, en aquella ocasión solo se alojaron unas 60 personas.
Los evacuados hacen fila ante una improvisada cocina para recoger la comida que los militares reparten: hoy se sirvió un plato de pasta caliente, una lata de atún en conserva, queso, embutidos y frutas, en su mayoría naranjas.
El principal miedo de la Cruz Roja es, según explicaron a Efe, en primer lugar el frío, por ser esta una zona de montaña, en la región de Las Marcas, y por otro lado la lluvia, que anoche cayó incesantemente, empapando toda la zona.
El municipio de Visso está muy próximo al epicentro de los varios terremotos que desde ayer y en las últimas horas han afectado a la zona, el mayor de magnitud 5,9 en la escala de Richter.
Además está cerca de los municipios de Arquata del Tronto, Accumoli o Amatrice, devastados por un terremoto el pasado 24 de agosto que se saldó con la vida de 297 personas, miles de desplazados y cuantiosos daños materiales.
Con información de EFE