El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, ha tomado la decisión de disolver el Bundestag, la Cámara Baja del Parlamento, y ha confirmado que se celebrarán elecciones anticipadas el 23 de febrero de 2024.
Esta medida surge tras la solicitud del canciller Olaf Scholz, quien enfrentó una moción de confianza el pasado 16 de diciembre, lo que provocó el colapso de la coalición que gobernaba el país.
En su anuncio, Steinmeier subrayó la importancia de contar con un gobierno estable en un momento en que Alemania enfrenta desafíos significativos, como una recesión económica y crisis internacionales, incluyendo los conflictos en Ucrania y Oriente Medio.
«He decidido disolver el Bundestag», dijo el jefe de Estado alemán en una breve intervención en el Palacio de Bellevue, su residencia oficial, en la que destacó la importancia de la «estabilidad política», un «valioso bien» que debe ser protegido en un contexto excepcional como el actual, en el que Alemania celebrará elecciones anticipadas el próximo mes de febrero.
Hizo hincapié en que es crucial tener un Parlamento que funcione adecuadamente para poder abordar estos problemas.
El presidente también hizo un llamado a los partidos políticos y a los ciudadanos para que la campaña electoral se lleve a cabo con respeto y transparencia. Destacó la necesidad de estar atentos a la influencia externa y a cualquier forma de violencia que pueda afectar el proceso electoral.
«Estoy convencido de que para el bienestar de nuestro país, unas nuevas elecciones ahora son el camino correcto», dijo Steinmeier.
Además, animó a todos a participar en las elecciones, recordando que cada voto cuenta y puede marcar una gran diferencia.
Esta disolución del Parlamento es un hecho poco común en Alemania; es solo la tercera vez que se convocan elecciones anticipadas desde la reunificación del país en 1990. Sin duda, este es un momento crucial para la política alemana y para el futuro del país.