Aún no se ha logrado percibir con claridad el impacto de las decisiones adoptadas en el XXV Encuentro del Foro de Sao Paulo celebrado en Caracas. Muchos creen que ese evento es la raíz de los conflictos que azotaron a la región desde agosto. Sin embargo, el impacto buscado es de más largo aliento, porque intenta allanar el camino para la continuidad de la izquierda latinoamericana en el poder recurriendo a varias vías, entre ellas la ideologización, según difundió Alnavío
El Político
El anfitrión del citado encuentro, Nicolás Maduro, ha tratado de dar cumplimiento a los puntos acordados. Recientemente anunció la creación de la Universidad Internacional de la Comunicación, con sede en Caracas y que comenzará actividades en el primer tramo de 2020. “Debe ser una universidad para la creación, para la conciencia, para la defensa de la verdad y para la batalla mundial”, afirmó.
![](https://vpol1tico.com/wp-content/uploads/2019/12/Maduro-Raul-Castro-890x395_c.jpg)
Lo que muchos condenan es que este proyecto sea propuesto por un reconocido violador de la libertad de prensa en el ámbito internacional. El informe sobre la situación de Venezuela, elaborado en julio por la alta comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones, Michelle Bachelet, señaló que las autoridades venezolanas han “tratado de imponer una hegemonía comunicacional imponiendo su propia versión de los hechos y creando un ambiente que restringe los medios de comunicación independientes” y, para ello, han perseguido, atacado y detenido periodistas, mientras bloque sitios web de noticias independientes e incluso las principales redes sociales.
![](https://vpol1tico.com/wp-content/uploads/2019/12/represion-vzla.jpg)
Es de hacer notar que el anuncio de la creación de la universidad tuvo lugar al cierre del primer Congreso Internacional de la Comunicación que tuvo lugar en Caracas en los primeros días de diciembre bajo el lema ‘¡Ahora hablan los pueblos!’. Este evento es parte de la onda de revolución comunicacional que la izquierda quiere expandir por Latinoamérica. “Ha empezado una nueva ola de liberación de los pueblos y no podrá detenerlo el imperialismo ni con golpes de Estado, ni con persecución”, afirmó Maduro.
De hecho, ya está previsto el segundo Congreso para febrero de 2020 en Managua. En tal sentido la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, informó que la Universidad Internacional de la Comunicación también tendrá sede en ese país a través del Consejo Nacional de Universidades “para promover la verdad de los pueblos en las universidades”.
Alianzas estratégicas
César Trómpiz, ministro para la Educación Superior de Venezuela, señaló que la recién creada universidad operará en alianza con países como Perú, Argentina, Bolivia, Cuba y México con el objeto de “satisfacer la capacidad de comunicar y construir nuevos códigos culturales y de relación entre los pueblos” e “integrar los esfuerzos comunicativos de los pueblos en lucha”.
Por su parte, el presidente de la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, agregó que para la universidad se podrían utilizar las instalaciones del diario El Nacional, ya que mantiene una querella legal por difamación con sus editores que, en un primer fallo a su favor, les ordena pagarle 1.000 millones de bolívares. Aunque el caso no ha agotado todas las instancias legales, Cabello lo da por cerrado. “Apenas tenga la sentencia, me dicen dónde firmar para entregar el edificio para la Universidad Internacional de la Comunicación”.
Lo cierto es que el primer Congreso determinó que la Universidad Internacional de la Comunicación está “concebida como una comunidad de saberes a través de una plataforma de formación, investigación, producción de conocimientos y de contenidos, para aportar al proceso de liberación de los pueblos, a la búsqueda de la igualdad, el buen vivir y la justicia social”.
Tanto Maduro como su gente consideran esa instancia como un bastión de lucha para darle visibilidad a las luchas populares, lo que demanda, igualmente, la creación de Redes Internacionales de Comunicación donde los partidos políticos, movimientos sociales y organizaciones del Poder Popular articulados a través del Foro de Sao Paulo y sus alianzas podrán confluir usando sus distintas plataformas de comunicación.
Con información de: Alnavío