El presidente de la República, Rafael Correa, se refirió el pasado sábado al amparo constitucional que presentó en contra de la resolución del Consejo de Disciplina de la Armada en relación al caso del capitán de corbeta Edwin Ortega. Dicho Consejo inadmitió la denuncia planteada en contra del oficial, quien envió al Primer Mandatario un correo insultante.
El Jefe de Estado resaltó la decisión de la jueza Vanessa Wolf quien dejó sin efecto, el pasado jueves, la resolución de dicho consejo y dispuso que sea uno nuevo el que juzgue a Ortega. Recordó que la Constitución determina que el Presidente de la República es la máxima autoridad militar, así como La Ley Orgánica de la Defensa Nacional.
El Mandatario dijo que lo que está en discusión es que, para dejarlo en la impunidad y sin sanción, "se les ocurrió la simpática teoría de que el Presidente no es superior militar, en consecuencia, se puede insultar al Presidente y no pasa nada, pero si insultan a un coronel, ahí sí. ¿Cómo íbamos a permitir tamaño despropósito de cuatro o cinco de un Consejo de Disciplina cambiando la Constitución?", señaló.
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Durante el Enlace Ciudadano 491, Correa desglosó punto por punto la carta que le envió Ortega, en la que se refirió a un "intento de dividir a las Fuerzas Armadas desinformando en las sabatinas". El capitán también opina en temas referentes al retiro de edecanes, habla de un supuesto "desgaste mediático", de la entrega de colegios militares y liceos navales al Ministerio de Educación, el cierre de agregadurías, el proyecto del Libro IV, entre otros temas.
"Todos debemos someternos a la ley y al Estado de derecho y según eso el poder militar debe estar sometido al poder civil, no al revés. Entonces, ese Consejo trató de cambiar no solo la ley, sino la Constitución, los principios mismos de la República, de la democracia, por eso tuvimos que presentar esa acción de protección", apuntó el Mandatario.
De su lado, el ministro de Defensa, Ricardo Patiño, reiteró que el deber de los militares es proteger al pueblo ecuatoriano y al territorio nacional. Acotó que no deben pronunciarse políticamente. "Ellos no pueden hacer este tipo de declaraciones, cualquier militar en servicio activo, incluso para dirigirse a algún funcionario público de alto rango tiene que pedir permiso en los correspondientes espacios orgánicos".
Finalmente, el presidente Correa insistió en que dicha misiva representa "un manifiesto político de los más retrógrados que he visto en los últimos tiempos en nuestra América y que refleja sectores totalmente retardatarios de nuestras Fuerzas Armadas". Las FF.AA., dijo, tienen que respetar la Constitución y ser obedientes, no deliberantes".
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