Una procesión multitudinaria recorrió este 14 de enero las calles de la Arquidiócesis de Barquisimeto en honor a la Divina Pastora, para pedir a esta advocación mariana que interceda por Venezuela, cuya crisis sigue agravándose, tal como advirtieron hace unos días los obispos. La presencia de Juan Guaidó en la Procesiónm quien fue ovacionado, y los sermones de los sacerdotes desataron la ira del régimen.
El Político
Nicolás Maduro se refirió a las declaraciones de algunos obispos a propósito de celebrase la visita 164 de la Divina Pastora a Barquisimeto, estado Lara, exigiéndoles que “deben aprender a respetar” al pueblo católico. “Repudiamos que intenten politizar el Día de la Divina Pastora. Exigimos respeto de los obispos”, dijo.
Durante la rendición de su Memoria y Cuenta de 2019, Nicolás Maduro criticó la presencia del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, en la procesión de la Divina Pastora en la ciudad de Barquisimeto, donde además, el obispo Víctor Hugo Basabe, condenó que diputados de la AN hayan arremetido contra el Parlamento el pasado 5 de enero.
“Los obispos deben aprender a respetar”
“Repudiamos que intenten politizar el Día de la Divina Pastora. Nosotros respetamos, por eso ustedes (oposición) jamás verán a ninguno de los líderes de la revolución manipulando procesiones y santos. Nuestra fe en Cristo es desde el corazón, y respetamos y apoyamos todas las manifestaciones de fe benditas del pueblo como patrimonio espiritual y cultural que deben ser especial. Deben aprender a respetar el pueblo católico de Venezuela (…) debemos exigir el respeto de los obispos, del pueblo católico”, sentenció.
Maduro hizo un convenio con las iglesias cristianas a las cuales ofreció mantener las sedes, ayudarlas con dinero y distribuir instrumentos chinos para que puedan cantar y elevarse a Dios.
Lo que molestó a Maduro: El libro de Judith
Miles de feligreses recibieron a la Divina Pastora en La Catedral de Barquisimeto, en su visita 164, este 14 de enero, en donde la misa fue oficiada por monseñor Polito Rodríguez, obispo de la Diócesis de San Carlos, la cual se centró en el Libro de Judit y el Evangelio de San Juan, que recogen el sufrimiento de la Virgen María quien “no solo vio morir a un inocente, sino a su propio hijo”.
Al concatenar las Sagradas Escrituras con la “realidad del país”, comparó el dolor de la María Madre de Dios, con el de las madres venezolanas que “ven morir a sus hijos a causa de la violencia en las calles, en los hospitales por falta de medicina y en las cárceles por falta de un sistema sustentado en la justicia".
Asimismo, fustigó a quienes “pretenden llevar a la contradicción. Somos un pueblo con ustedes y sufrimos con ustedes”. Igualmente, vaticinó que la paga de quienes ambicionan el poder es la aniquilación, como se relata en el libro de Judith.
Al referirse a la situación política de país, dijo que ante “un gobierno ilegal y fallido, Venezuela clama por un cambio de rumbo, una vuelta a la Constitución. Que exige a quienes ejerce el poder ilegalmente, un nuevo presidente de la república”.
Los feligreses gritaban "Libertad, libertad"
Desde Santa Rosa, localidad desde donde parte la procesión de la Divina Pastora, en medio de la misa ofrecida por Monseñor Víctor Hugo Basabe, los feligreses empezaron a gritar: ¡Libertad, Libertad!, momento en el cual televisoras regionales y nacionales, que transmitían la homilía, silenciaron el audio ambiente de la transmisión.
“Que en sus manos pongamos también el sufrimiento en el que la mayoría de los venezolanos vivimos ahora, así como la esperanza y el anhelo de todo un pueblo que clama porque esta hora termine y porque prontamente sobre sus llanuras y cordilleras, sobre sus macizos y extensos mares, pero sobretodo que sobre las sienes de los que habitamos esta tierra alboreen los rayos de la libertad y nos anuncien que la pesadilla ha terminado”, fue parte de lo que dijo Monseñor Basabe antes de escuchar la petición, que a gritos, hacían los devotos que participaban en la 163 edición de la procesión de la Patrona del estado Lara.
Como cada año, los fieles acuden el 14 de enero al pueblo de Santa Rosa, donde se encuentra la imagen mariana, para trasladarla en un recorrido de más de siete kilómetros hasta la Catedral de Barquisimeto, en el estado Lara, donde permanece hasta el sábado anterior al Domingo de Ramos, cuando es llevada de retorno a su iglesia.
Con información de Ultimas Noticias, Iglesia Católica, El Impulso
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