El respaldo de Estados Unidos a Israel, luego del atentado terrorista perpetrado por Hamás, ha tenido una incidencia negativa en la popularidad del presidente Joe Biden.
El Político
Un sondeo reciente muestra que la buena reputación que tenía Biden entre los estadounidenses de ascendencia árabe cayó 42%.
Hacia 2020, año en el que el demócrata ganó la elección presidencial, su aceptación entre los árabe – estadounidenses era de 59%.
Tras años más tarde, la cifra cayó en picada para ubicarse en apenas 17%.
En función de tales números, el estudio, elaborado por el centro Arab American Institute, concluye que dos de cada tres estadounidenses de ascendencia árabe rechazan la gestión del actual mandatario.
Lo que más causa aversión, indica la encuesta, es la respuesta de apoyo brindada por la Casa Blanca a Tel Aviv, tras la embestida del 07 de octubre.
El sondeo revela además que la “gran mayoría” de la comunidad árabe asentada en Estados Unidos cree que el país debería instar “a un alto al fuego”.
Desde que inició el conflicto entre Israel y el movimiento de resistencia islámica Hamás, Washington asumió una posición favorable a la nación hebrea.
Estados Unidos envió portaviones y acorazados. También apoya a Tel Aviv con munición ligera y modernos sistemas de armas.
Adicionalmente, ha otorgado a las autoridades israelíes un apoyo “sin líneas rojas”, que ha permitido al país adelantar una prolongada ofensiva militar en la Franja de Gaza.
Como colofón, la Casa Blanca solicitó al Congreso 100.000 millones de dólares que se distribuirán en fondos para Israel, Ucrania y la crisis migratoria en la frontera sur.