El temor de nuevos colapsos bancarios ha hecho que los depósitos bancarios en los Estados Unidos decaigan. Los clientes evitan poner su dinero en riesgo.
Mario Beroes/El Político
La caída es general y afecta a toda la banca comercial tras la quiebra de Silicon Valley Bank y otros dos bancos estadounidenses.
Por qué es importante
Datos publicados por la Reserva Federal (Fed) de los EEUU mostraron que la caída se ubicó en $ 125.700 millones en los depósitos a nivel de todos los bancos de EEUU en la semana que finalizó el miércoles 22 de marzo.
Aun así, el total de depósitos se situó casi $ 860.000 millones por debajo de su máximo histórico, y más de un tercio de esa caída, alrededor de $ 300.000 millones, ocurrió en las semanas posteriores a la quiebra de SVB el 10 de marzo y de Signature Bank.
Los depósitos en los bancos pequeños o regionales aumentaron hasta los $ 5,386 billones en la semana que finalizó el 22 de marzo, frente a los 5,381 billones de la semana anterior.
Las autoridades financieras estadounidenses han afirmado en repetidas ocasiones que los flujos de depósitos se han estabilizado tras la histórica corrida de depósitos en SVB y Signature, ambos con niveles excepcionalmente altos de depósitos que superaban el límite de seguro de $ 250.000 dólares de la FDIC.
A pesar de las preocupaciones de los responsables políticos de que las dos quiebras y la conmoción que causaron pudieran instigar una contracción del crédito y que los bancos se retrajeran de conceder préstamos, los préstamos bancarios aún no han registrado una caída sustancial.
Excepto en una categoría clave de préstamos empresariales: los préstamos comerciales e industriales.
Otras categorías de préstamos bancarios, desde bienes raíces comerciales y residenciales hasta tarjetas de crédito al consumo y préstamos para automóviles, han mostrado pocos cambios desde que estalló la agitación bancaria a principios de este mes.