A la hora de comprar un arma en EEUU no tendrá mayores inconvenientes. Solo tiene que tener la edad requerida y pasar, en algunos casos, un examen de antecedentes penales.
El Político
La prueba de antecedentes es solicitada solo en algunos estados. En otros, no son necesarios ni los antecedentes en EEUU.
Sin embargo, hay una forma incluso más sencilla de tener un arma sin necesidad de ningún control o trámite burocrático: ensamblar tu propia pistola en casa.
Es tan sencillo -y legal- como ordenar en internet un kit con las diferentes partes y herramientas
El resultado es casi el mismo: un arma de fuego.
Pero sin número de serie. Sin registro. Sin controles. Sin que ninguna autoridad sepa que la tienes. Accesible a menores y personas con trastornos mentales.
Las llaman "armas fantasma" (ghost guns, en inglés) porque al ser ensambladas en casa, no existe forma en que se les pueda rastrear.
La Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de EEUU (ATF, por sus siglas en inglés), no obstante, las considera "legales" siempre que estén destinadas para uso personal.
Pero este jueves, el presidente de EEUU Joe Biden firmó una orden ejecutiva para intentar controlar -y restringir-la venta de materiales y herramientas que permitan ensamblar este tipo de armamento en casa.
El mandatario intenta frenar la "epidemia de violencia por armas".
"La violencia con armas de fuego en este país es una epidemia y es una vergüenza internacional", dijo Biden desde los jardines de la Casa Blanca.
El mandatario cuestionó la facilidad con la que se pueden ensamblar estas armas y el peligro que suponen.
"Estas son armas caseras (…) En consecuencia, cualquier persona, desde un criminal hasta un terrorista, puede comprar este kit y en tan solo 30 minutos, ensamblar un arma ", dijo.
Poco después del discurso de Biden se reportaron tiroteos masivos en Carolina del Sur y Texas.
La venta legal de armas está protegida por la Segunda Enmienda de la Constitución de EEUU y cualquier intento de control es visto con recelo por los defensores de esta enmienda.
La administración de Biden propone las siguientes medidas:
My Administration is taking initial steps to reduce gun violence, including:
– Stopping the proliferation of ghost guns
– Regulating pistols modified with a stabilizing brace
– Helping states adopt red flag laws
– Supporting community violence interventions— President Biden (@POTUS) April 8, 2021
Frenar las “armas fantasmas”
En tan sólo media hora es posible montar un arma de fuego. Existen kits que cuentan con componentes e instrucciones para montarla.
En casa. Kits que en muchos casos no son detectados por las autoridades, de ahí que las denominen “armas fantasmas”.
Esto ha sido definido por la Casa Blanca como “un problema creciente”. De ahí que el Departamento de Justicia, dentro de 30 días, tenga que lanzar una propuesta para este tipo de armas.
Today, I’m joining Vice President Harris and Attorney General Garland to announce new actions to reduce gun violence. Tune in. https://t.co/p6dgJRYKwe
— President Biden (@POTUS) April 8, 2021
Cuidado con los estabilizadores para armas
El responsable de la tragedia de Boulder habría usado una pistola con un brazo ortopédico, permitiendo que el arma sea más estable y precisa, al tiempo que era prácticamente indetectable.
El Departamento de Justicia tiene 60 días para aclarar “cuándo un dispositivo comercializado como soporte estabilizador convierte efectivamente una pistola en un rifle de cañón corto sujeto a los requisitos de la Ley Nacional de Armas de Fuego”.
Limitar el acceso a armas a las personas en crisis
El gobierno pretende permitir a los estados aplicar leyes al estilo “bandera roja”, objetivo que se ha fijado para dentro de dos meses.
Las leyes de bandera roja permiten a los miembros de una familia o a las fuerzas de seguridad “solicitar una orden judicial que prohíba temporalmente a las personas en crisis acceder a armas de fuego si representan un peligro para ellos mismos o para los demás”.
Además, Joe Biden ha pedido al Congreso aprobar una ley nacional de bandera roja y una legislación que incentive a los estados a tener normas de este tipo.
Invertir en zonas problemáticas
En todas las ciudades de Estados Unidos, el número de homicidios está creciendo. Es la primera vez en la historia que esto ocurre.
El objetivo de la Casa Blanca es hacer frente a estos problemas con “estrategias distintas del encarcelamiento”. De ahí que insistan en invertir en desarrollo. ¿Cómo?
– El American Jobs Plan. Este propone una inversión de 5.000 millones de dólares durante ocho años para apoyar los programas comunitarios de intervención contra la violencia.
Una parte clave “es ayudar a conectar a las personas con la capacitación laboral y las oportunidades laborales”.
– Aprovechar las ayudas médicas. Esta es una medida pensada para los estados.
La propuesta del Departamento de Salud es que utilicen las ayudas del Medicaid para apoyar en hospitales y centros de salud a las comunidades que sufren violencia.
– Redirigir inversiones. La idea es que cinco agencias federales modifiquen hasta 26 programas centrados en apoyar a las comunidades que sufren violencia. “Estos cambios significan que podemos comenzar a aumentar las inversiones en intervenciones de violencia comunitaria mientras esperamos que el Congreso asigne fondos adicionales”.
Actualizar los datos sobre armas de fuego
El informe más completo hasta la fecha se elaboró en el 2000. Mucho ha cambiado desde entonces. Así lo piensa la Casa Blanca. “
Hay buenas razones para creer que los canales de tráfico de armas de fuego han cambiado desde entonces; por ejemplo, debido al surgimiento de las ventas en línea y la proliferación de ‘armas fantasmas’”.
La idea es que el Departamento de Justicia emita un informe nuevo y completo sobre el tráfico de armas de fuego. Un documento que será actualizado anualmente.
Un directivo para la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego
David Chipman es el elegido por el presidente para desempeñarse como director de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego.
Esta es una “agencia clave”, según la Casa Blanca, “para hacer cumplir nuestras leyes sobre armas”.
Lo que pasa es que esta oficina no ha tenido director desde 2015. Chipman trabajó 25 años en esta agencia y hasta ahora ha estado lanzando leyes de seguridad de armas basadas“en el sentido común”.