China es "un adversario" de los Estados Unidos, no un "enemigo", aseguró ante el Senado el general Mark Milley, nominado como futuro jefe del Estado Mayor Conjunto, pero sostuvo que para que la situación no cambie, las Fuerzas Armadas estadounidenses deben "estar preparadas" y no ceder su "ventaja".
"China no es un enemigo -quiero dejar eso claro-, es un adversario (…). En términos militares, un enemigo es aquel con el que existe un conflicto armado, con el que estás en guerra y no estamos en esa situación", señaló Milley durante su audiencia de confirmación ante la Cámara Alta.
Milley, que actualmente ocupa el cargo de jefe del Estado mayor del Ejército, subrayó que el Pentágono no quiere entrar en guerra con China, pero defendió que para mantener la paz la "mejor manera" de hacerlo es mediante una política de disuasión.
"Creo que la mejor manera de mantener la paz es garantizar que estamos preparados", apuntó el militar.
No obstante, Milley llamó la atención de los legisladores sobre la importante inversión en Defensa que, en los últimos años, ha realizado Pekín para modernizar a su ejército "en todos los ámbitos": tierra, mar, aire e, incluso, el espacio.
"China está mejorando su ejército muy, muy rápidamente (…). Tenemos que asegurarnos de no perder la ventaja sobre nuestros adversarios, especialmente sobre China", dijo.
El general hizo referencia a la situación en el mar de China Meridional, un escenario que se ha vuelto el foco de tensiones entre ambas potencias debido a la creciente presencia militar del gigante asiático en la región.
En este sentido, el general Milley consideró que el aumento de las patrullas de buques de la Armada estadounidense en la zona ha sido una respuesta "adecuada" para hacer frente a la situación.
En caso de ser confirmado por el Senado, Milley se convertirá en el líder del Estado Mayor Conjunto el próximo mes de septiembre, cuando se retirará su actual jefe, el general Joseph Dunford.
Fuente: El Diario