China no cerrará la puerta al mundo al priorizar el mercado interno, la innovación de alta calidad y su autosuficiencia tecnológica.
El Político
Los próximo cinco años estarán dirigidos a priorizar sus productos locales como las claves del país.
"No cerraremos la puerta al mundo, más bien al contrario. China necesita cada vez más al mundo y este a China para mejorar su tecnología", afirmó el ministro de Ciencia y Tecnología chino, Wang Zhigang a Expansión.
Wang recalcó que el desacoplamiento entre las economías de las dos mayores potencias mundiales, EEUU y China, "no es bueno para nadie" y afirmó que "sin importar cómo cambie el mundo" el gigante asiático "seguirá con su política de apertura".
El ministro recordó que, pese al incremento de la tensión en los últimos meses entre Estados Unidos y China, en el tercer trimestre de 2020 el comercio entre ambos países creció un 16% respecto al mismo periodo del año pasado.
"La profundización de la reforma y la apertura continúa siendo la clave y la inevitable opción para el desarrollo. El dinamismo liberará todas las potencialidades de la economía china", subrayó el ministro.
Tecnología
Varios dirigentes del Comité Central que participaron en la rueda de prensa recalcaron que impulsar la innovación y conseguir la suficiencia tecnológica es un asunto de crucial importancia para China.
El órgano de dirección del partido estableció planes para ello "antes que para los otros sectores", explicó Wang, con el fin de "adaptarse a las nuevas características del desarrollo económico mundial en la nueva era".
"Necesitamos soluciones tecnológicas más que nunca, tenemos que enfocarnos en este avance", recalcó, y consideró "importante hacer esto mientras perseguimos la circulación dual", el nuevo concepto de desarrollo propuesto por China para el próximo quinquenio, que se centra en la expansión de la demanda interna y su potenciación a través de la economía externa.
En este sentido, se pretende "hacer de China el lugar de elección para talentos, empresas y expertos de todo el mundo".
Camino hacia 2035
El plan quinquenal que propuso el Comité y que será elevado a la Asamblea Nacional Popular (ANP, legislativo chino) para su aprobación el próximo marzo, "abrirá el camino para los objetivos a largo plazo del país en 2035″, que también fijaron los máximos dirigentes chinos en su reunión de cuatro días en Pekín.
"La reforma, la apertura y la innovación tecnológica son las tres claves principales para conseguir nuestro objetivo en 2025″, destacó Han.
Desigualdades del desarrollo
El Comité puso especial atención en corregir en los próximos cinco años las "desigualdades del desarrollo" y el aumento de la brecha de ingresos tanto entre regiones del país como entre sus habitantes.
"La principal contradicción es el desequilibrio en el desarrollo. Estamos en un critico momento en que nos movemos de un país de ingreso medio a uno de ingreso alto con nuestro PIB superando los 100 billones de yuanes (14,90 billones de dólares, 12,72 billones de euros)", dijo Han.
Los mandatarios comunistas también defendieron entre sus prioridades "reforzar el poder blando cultural chino" y la industria cultural, ya que "la modernización socialista sería imposible sin desarrollar una pujante cultura socialista", según Wang Xiaohui, viceministro de Publicidad.