La Comisión Económica para Améri.a Latina y el Caribe (Cepal) mejoró este martes (23.08.2022) su proyección de crecimiento para la región para el año 2022, que pasó de 1,8 por ciento al 2,7 por ciento de expansión del PIB.
El Político
Sin embargo, advirtió de vientos en contra y que los países de la región enfrentan un "escenario muy complejo”, donde la inflación, la guerra en Ucrania y las demandas sociales marcan la agenda.
"Una secuencia de crisis ha llevado al escenario de bajo crecimiento y aceleración inflacionaria que presenta la economía global, lo que junto al menor crecimiento del comercio, la apreciación del dólar, y el endurecimiento de las condiciones financieras globales, afectarán negativamente a los países de la región", dijo el organismo técnico de las Naciones Unidas al presentar su reporte.
El documento, publicado periódicamente por la comisión regional de las Naciones Unidas desde 1948, resume el desempeño de la economía regional en 2021 y analiza su evolución para 2022.
En su 74⁰ edición examinará de manera especial el papel de la inversión para una recuperación sostenible e inclusiva.
Autoridades instan a profundizar la #cooperación regional para atender la creciente demanda de información estadística oportuna y de calidad, durante la inauguración de la XXI reunión del Comité Ejecutivo de la Conferencia Estadística de las Américas.
Más➡️https://t.co/6KwGQE05vz pic.twitter.com/azugJ0dJjs— CEPAL (@cepal_onu) August 24, 2022
El recien publicado documento añade que "la desaceleración económica se ha visto profundizada por los efectos de la guerra en Ucrania" y "las crecientes limitaciones que enfrenta la política macroeconómica interna para impulsar el crecimiento".
El director de Desarrollo Económico del organismo, Daniel Titelman, afirmó que la región se encuentra en una "coyuntura muy difícil" debido a que "está retornando a una trayectoria de bajo crecimiento que ya se observaba antes de la pandemia".
Boom de Guyana
"Esta dinámica de bajo crecimiento está siendo acompañada por presiones inflacionarias que generan una situación muy compleja de desafío para la política macro (económica)", afirmó el experto de la Cepal. El informe llama la atención, asimismo, respecto al "bajo dinamismo de la creación de empleo, caídas de la inversión y crecientes demandas sociales”.
En cuanto a las diferentes subregiones, la proyección de crecimiento para América del Sur es de 2,6 por ciento, con Venezuela a la cabeza (10 por ciento), seguido por Colombia (6,5 por ciento) y Uruguay (4,5 por ciento).
Para América Central la estimación es de 4,1 por ciento, con Panamá con los mejores números (7 por ciento)
Para América Central la estimación es de 4,1 por ciento, con Panamá con los mejores números (7 por ciento), mientras que el Caribe está previsto que crezca 10,2 por ciento, aunque esta subregión alcanza al 4,7 por ciento si se excluye Guyana (52 por ciento), que vive un boom petrolero.
Los países que menos crecerán serán México, Chile (ambos un 1,9 por ciento), Brasil (1,6 por ciento), Paraguay (0,2 por ciento) y Haití (-0,2 por ciento).
América Latina vive una enorme desigualdad en la recuperación económica tras la pandemia.
La emergencia sanitaria causó en la región pérdida del valor de las principales monedas, índices históricos de inflación, informalidad y una mayor deuda pública para las economías emergentes, entre otros efectos colaterales.
Comissão Econômica para América Latina e Caribe @cepal_onu revela que região deve retornar ao baixo crescimento registrado antes da pandemia; dados são do Estudo Econômico 2022.#Ukraine️ #Covid_19 https://t.co/t9kCQWe59X
— ONU News Português (@ONUNews) August 24, 2022
Rebote, no crecimiento. Pese a que muchos gobiernos intentaron vender la idea de que la recuperación ha sido abrumadora en la región, no se trata más que de un efecto rebote, que los economistas describen como un repunte de la actividad económica tras una caída abrupta, como la recuperación tras una recesión como la vivida en la pandemia de Covid-19.
El Producto Interno Bruto, PIB, mundial no se contraída desde la crisis de 2008, aunque daba signos de desaceleración, informó France24.
Pero tras los cierres provocados por la pandemia en el mundo que obligaron a bloquear casi todas las actividades económicas, el PIB mundial se contrajo un 3,1 %, afectando a las economías más avanzadas.