Las consecuencias del cepo cambiario en Argentina no sólo generan distorsiones graves en la economía en la actualidad, sino que su eliminación, sin un plan adecuado, puede derivar en una hiperinflación a futuro. La advertencia la formula el economista Domingo Cavallo, y la dirige a todos los aspirantes a la presidencia de Argentina.
El Político
Cavallo, quien fue ministro de Economía en dos oportunidades, habla con conocimiento de causa. Admite que el cepo cambiario impuesto por el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner genera inercia inflacionaria. En consecuencia, entiende que, quien llegue a la Casa Rosada, querrá eliminar el cepo o control cambiario.
Pero, tras admitir esos dos hechos, lanza su advertencia: "Si para evitar la inercia inflacionaria que crea el cepo cambiario, el nuevo Gobierno decide eliminarlo de inmediato para todo tipo de transacciones, sin que haya habido tiempo para implementar un ajuste fiscal, y la economía haya digerido toda la excesiva emisión monetaria anterior, el resultado puede ser una explosión hiperinflacionaria".
Y a ese llamado de alerta le suma uno más preocupante aún. Esa explosión hiperinflacionaria sería "costosísima desde el punto de vista social y demoledora desde el punto de vista político".
No hacer promesas vacías
Domingo Cavallo, cuyo blog personal cavallo.com.ar es fuente de consulta de los principales medios argentinos, sugirió a los candidatos de la oposición ser "muy cautelosos con sus propuestas".
Decir en plena campaña lo que la gente quiere oír, puede dar buen resultado en las urnas electorales y volverse contra el oferente apenas algo salga mal.
Plantea tomar decisiones calculadas y afirma que quien asuma la presidencia tendrá que "sortear la trampa que quedará activada, sobre todo por la existencia del cepo cambiario". Así de complicada es su apreciación de la economía argentina.
¿Se puede evitar la hiperinflación?
En este caso, la medicina puede resultar un tanto amarga, pero necesaria de tragar. Para evitar la hiperinflación es necesario "ajustar las cuentas fiscales mediante la reforma del Estado, las privatizaciones y la apertura de la economía para eliminar el cepo cambiario del mercado comercial".
Pero, en la misma línea alertó: "Si en lugar de hacerlo con esa metodología decide eliminar de inmediato el cepo cambiario con la ilusión de producir el ajuste fiscal recurriendo a una fuerte devaluación que licue deudas, salarios y jubilaciones, al estilo del ajuste de enero de 2002, no encontrará régimen monetario alguno capaz de derrotar a la inflación en un mandato presidencial", enfatizó.
Sus estimaciones, realistas, pero poco esperanzadoras en lo inmediato, indican que, si se toman todas las medidas de saneamiento económico, en 2025 el bienestar podrá ser real en Argentina.
Fuente: Perfil