En los últimos cinco años, fiscales en el estado de Nueva York han estado investigando acusaciones de pagos ilegales en nombre de Donald Trump a la ex estrella porno Stormy Daniels, poco antes de las elecciones presidenciales de 2016.
El Político
Daniels ha señalado que Michael Cohen, abogado de Trump, le pagó US$130.000 a cambio de que no hablara en público antes de los comicios de 2016 sobre la relación extramatrimonial que había mantenido con el expresidente.
Trump ha negado haber tenido relaciones sexuales con Daniels y ha señalado que la investigación tiene motivos políticos, reportó ABC.
En 2018 estalló el caso de Stormy Daniels
El caso estalló de verdad en 2018, con Trump en la Casa Blanca. Daniels dio una entrevista al prestigioso programa ’60 Minutes’ y contó su relación con el presidente.
Se conocieron en julio de 2006, en Lake Tahoe (Nevada), donde Trump, entonces estrella de la telerrealidad con ‘El aprendiz’, la invitó a cenar y a su suite. Le prometió que la metería en su programa, los encuentros sexuales se sucedieron durante meses.
Daniels acabó dando todo tipo de detalles en un libro sobre su relación, incluida la forma del pene presidencial.
Trump lo negó todo. Cuando aquello ocurrió, su tercera esposa, Melania, había sido madre pocos meses antes. Su defensa empezó a flaquear por la tercera pata fundamental de esta historia: Michael Cohen, su abogado y muñidor en asuntos turbios. El letrado fue quien orquestó el pago a Daniels y puso el dinero de su bolsillo antes de recibir un reembolso por parte de la compañía de Trump.
Giro de tuerca por el fiscal Alvin Bragg
Desde entonces, el caso ha dado vueltas hasta la llegada de un nuevo fiscal a la ciudad de Nueva York. Se trata de Alvin Bragg y tomó posesión del distrito de Manhattan el año pasado.
Revivió el caso, convocó un gran jurado, hizo testificar a Daniels y a Cohen -Trump ha optado por no hacerlo- y está a punto de conseguir lo que muchos demócratas desean: ver a Trump arrestado.
Esa posibilidad ha convertido la política de EEUU en una olla a presión. Trump no solo es expresidente, también es el candidato a la presidencia de la primera potencia mundial de uno de sus dos grandes partidos. Y, hasta que no se demuestre lo contrario, el favorito para conseguirlo por el bando republicano.
Para dañar su imagen
Trump ha dejado en claro que continuará su campaña para convertirse en el candidato del partido Republicano a las elecciones presidenciales de 2024, incluso si es acusado.
Esfuerzos anteriores para llevarlo ante la Justicia – como dos juicios políticos en el Congreso, la investigación sobre la intervención rusa y los operativos judiciales en su casa de Mar-a-Lago, en el estado de Florida- han ayudado a aumentar su popularidad entre sus seguidores, por lo que una acusación de este tipo podrían tener un efecto similar.
En ese sentido, aunque se desconoce oficialmente si va a ser acusado esta semana y cuáles serían los delitos por los que se los consideraría responsable, el expresidente se ha puesto a predecir el posible arresto y ha hecho un llamado para la movilización de sus seguidores este martes.
Comparecencia en tribunal de Manhattan por caso Stormy Daniels
El caso de Stormy Daniels tuvo un avance importante a principios de este mes cuando se invitó a Trump a testificar ante un gran jurado, lo que según expertos indicaba que pronto podría enfrentar cargos penales.
Las audiencias se llevan a cabo en secreto y, según se informa, varios exayudantes de Trump han dado su testimonio ante los jueces.
Los medios estadounidenses dicen que los organismos judiciales en Nueva York se están preparando para la posibilidad de que Trump sea acusado y comparezca en un tribunal de Manhattan la próxima semana.
Además, están considerando los aspectos prácticos de llevar a un expresidente ante una corte, incluido cuestiones relacionadas con la seguridad.