El candidato presidencial por el Acuerdo Nacional por el Cambio, Paco Moncayo, presentó la mañana de este lunes 10 de octubre del 2016 sus propuestas en el ámbito económico, con miras a las elecciones del próximo año.
Inició con un análisis de la situación en lo que dijo muchos llaman la década perdida, otros la década ganada y otros la década desperdiciada, en referencia al Régimen del presidente Rafael Correa.
Para Moncayo, es necesario hacer un análisis objetivo y hay un especial crecimiento en asuntos sociales que no puede dejarse de reconocer. Sin embargo, considera un reto muy complicado mantener los logros en ámbitos de salud, educación, rehabilitación social, etc. con un petróleo a mitad de precio que en la mayor parte del actual Gobierno. Agregó que el modelo con el que se ha alcanzado estos avances no es sustentable.
Por ello cree que el próximo presidente tiene el reto de mantener los logros y eliminar los errores. Moncayo afirmó que en este tiempo se ha trabajado en un esquema de "estadolatría", por lo que recordó que en su administración del Municipio de Quito dio importancia a la fortaleza que debe tener el Estado pero también la necesidad de un sector privado que tenga posibilidades de aportar. "No se puede gastar más de lo que realmente se tiene", enfatizó Moncayo y dijo que el país tiene "más de USD 8 000 millones de déficit".
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Para Moncayo, el Estado en este período ahuyentó la inversión extranjera y ahora hace "esfuerzos desesperados" para atraerla e incluso busca un acuerdo con la Unión Europea "a destiempo" cuando podría haberse logrado en conjunto con la comunidad andina años atrás. Moncayo dijo que en el país debe haber preocupación porque "no le estamos vendiendo al mundo lo suficiente", quitando el petróleo del espectro. "250 000 personas han perdido su empleo" y al no generar ingresos no consumen. El asunto, según Moncayo, se convierte en un círculo vicioso que afecta más a una economía golpeada.
Moncayo afirma que se recibirá a un país en complicadas circunstancias económicas pero, como le ocurrió cuando asumió la Alcaldía de Quito en 1999, probablemente termine por echarle la culpa de los problemas al nuevo Régimen. La libertad es el oxígeno que se necesita para ser creativos y producir.
Por ello, agregó el precandidato, en el programa de Gobierno se plantea reformar la Constitución "para recuperar las instituciones básicas de la República" y fortalecer la Democracia. Si el Estado concentra todas sus instituciones en una autoridad, no se puede hablar de libertad y democracia.
Entre otras cosas dijo que era necesario permitir que los jóvenes elijan libremente lo que quieren estudiar para que puedan ser productivos al salir de la Universidad. Otros temas como la Ley de Empresas Públicas, las salvaguardas, reformas laborales también deben ser analizadas, según el candidato.
Con información de El Comercio
