La Cancillería de Uruguay definió hoy como un "malentendido" el conflicto diplomático suscitado por las declaraciones del ministro de Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, quien dijo que Brasil intentó "comprar" el voto de su país para evitar el traspaso a Venezuela de la presidencia del Mercosur.
La cartera de Exteriores uruguaya emitió un comunicado a la luz del descontento del canciller de Brasil, José Serra, sobre los dichos de Nin respecto de la supuesta intención de incluir al país en sus negociaciones comerciales a cambio de evitar que Venezuela presidiese el bloque económico integrado además por Argentina y Paraguay.
"Hubo un malentendido sobre la propuesta brasileña de efectuar actividades conjuntas de promoción comercial entre ambos países en terceros mercados, y ahora ha quedado perfectamente claro que la misma no guarda relación alguna con la consideración del traspaso de la presidencia pro témpore del Mercosur", indica el escrito remitido hoy por la cancillería.
El 5 de julio, en una rueda de prensa concedida en Montevideo tras reuniones con Nin y con el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, Serra admitió que Brasil adelanta una "gran ofensiva" comercial en África subsahariana e Irán y, por tal motivo, quería que Uruguay lo acompañara en las negociaciones con esos países como "socio", independiente de las que adelanta el Mercosur.
Según el comunicado de la cancillería de Uruguay, el intercambio entre las autoridades fue "altamente positivo", en consonancia con "los estrechos vínculos de amistad y de cooperación" entre ambos países, y se abordaron separadamente los asuntos bilaterales y las posturas discordantes sobre el traspaso de la presidencia del bloque.
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No obstante, la semana pasada, Nin aseveró ante la Comisión de Asuntos Internacionales de la Cámara baja del Parlamento uruguayo que la postura brasileña para evitar el traspaso de la presidencia del Mercosur a Venezuela le "molestó bastante" a él y "mucho" al presidente Vázquez.
"No nos gustó mucho que (el canciller de Brasil, José Serra), viniera a decirnos (…) que venían con la pretensión de que se suspendiera el traspaso y que, además, si se suspendía, nos iban a llevar en sus negociaciones con otros países, como queriendo comprar el voto de Uruguay", expresó Nin.
"El presidente se lo dijo clara y rotundamente: Uruguay va a cumplir con la normativa y va a llamar al cambio de la presidencia", agregó en esa ocasión.
Estos dichos derivaron en un llamado a consulta al embajador de Uruguay ante Brasil, Carlos Daniel Amorín-Tenconi; en tanto que el canciller brasileño, José Serra, expresó su "profundo descontento y sorpresa" ante la situación.
Con información de EFE