El Gobierno de Canadá anunció que invertirá 138 millones de dólares canadienses (106 millones de dólares estadounidenses) para construir nuevos centros de detención para inmigrantes, a la vez que aseguró reformará ese sistema.
El anuncio de la inversión y la reforma del sistema de detención de migrantes se produce después de la muerte en los últimos meses de varios detenidos en circunstancias sospechosas, incluidas dos personas en marzo de este año.
La organización no gubernamental End Immigration Detention Network cifra en 15 los detenidos muertos desde el año 2000.
Además, el pasado 11 de julio, 60 inmigrantes detenidos por Canadá iniciaron una huelga de hambre para protestar por permanecer detenidos de forma indefinida en prisiones de máxima seguridad.
En 2014, un informe confidencial de la Cruz Roja filtrado a los medios de comunicación criticó el sistema de detención de migrantes de Canadá, entre otras razones, porque en muchas regiones del país los inmigrantes eran retenidos en prisiones junto con peligrosos delincuentes.
Datos oficiales señalan que, de media, Canadá mantiene encarcelados entre 450 y 500 inmigrantes. Pero cifras de la Cruz Roja indican que en 2013-2014 Canadá detuvo a 10.088 inmigrantes, entre ellos 197 menores, por una media de 10 días.
Sin embargo, el ministro de Seguridad Pública de Canadá, Ralph Goodale, afirmó hoy durante una rueda de prensa, en la que anunció las inversiones, que Ottawa llevará a cabo una reforma basada en que las detenciones y el encarcelamiento deben ser el último recurso de las autoridades para lidiar con los inmigrantes.
Goodale subrayó que, desde que asumió el puesto a finales de 2015, ha escuchado "las preocupaciones sobre la detención de inmigrantes" y ha estudiado esas preocupaciones "con gran interés".
"El Gobierno está ansioso de responder a las debilidades que existen y mejorar", agregó el ministro.
Con información de EFE