Se sabe que la crisis que ha generado la pandemia del nuevo coronavirus no solo es sanitaria, a nivel económico el colapso mundial ha sido tremendo, y por supuesto, los Estados Unidos no han podido escapar de ello.
El Político
En ese sentido, se pudo evidenciar como en marzo se produjo un 7.5% de caída del consumo en los Estados Unidos según el Departamento de Comercio.
Se trataría del declive más pronunciado desde que empezaron a llevarse los registros de esta cifra en el año 1959. Supera y por mucho al récord anterior que se dio en 1987 cuando la caída fue de un 2.1%.
Esta alta cifra que se le suma un 2% de baja en los ingresos personales, quiere decir que los consumidores «cancelaron, restrigieron o reorientaron» sus gastos, según el Departamento en el reporte realizado.
Ya el gobierno había reportado en días pasados que la tasa anual se contrajo un 4.8% en el primer trimestre del año, debido a la baja de consumo más pronunciada desde 1980, reportó una nota de Diario Las Américas.
La actividad económica de los Estados Unidos abarca el 7’% en gastos del consumidor, antes de la pandemia los números eran muy buenos, perro todo se ha desplomado.
Seguirá cayendo
Los pronósticos prevén que el consumo estadounidense siga cayendo, analistas dicen que el Producto Interno Bruto se contraerá un 40% en el trismestre de abril y junio. Esto representaría el declive más grande de la historia.
Otros tantos economistas también precisan que la contracción seguirá en caída hasta que llegue la vacuna contra el COVID-19 y esto no está previsto que llegue pronto. Todo lo contrario, se espera que salga para mediados de 2021.
“Los temores por el coronavirus, las medidas de distanciamiento social, la volatilidad financiera y el desplome de la confianza pública han afectado severamente la capacidad y el deseo de los consumidores de gastar su dinero”, dijo Lydia Boussour, economista de Oxford Economics.
Con información de Diario Las Américas