Un asunto de burocracia y otros intereses podrían dejar inmunes a los oficiales de policías que actuaron tardíamente en la matanza de Uvalde.
El Político
Recientemente esta semana salió a la luz pública un vídeo de 82 minutos que dejó en evidencia la mala actuación policial en este caso de Uvalde.
Gracias a este material audiovisual está en boca de muchos las posibles consecuencias que les podría caer a los policías en cuestión su accionar sobre esta masacre que terminó con la vida de 19 niños y dos profesoras.
Reporta CNN que el tan anticipado informe preliminar de la Comisión de Investigación de la Cámara de Representantes de Texas sobre el tiroteo más mortífero en una escuela estadounidense en casi una década se espera pronto, aunque no está claro cuán amplio ha sido el trabajo del panel o qué podría resultar de su investigación.
Hasta el momento, la persona que supuestamente estuvo a cargo durante el tiroteo del 24 de mayo, el jefe de policía del distrito escolar Pedro "Pete" Arredondo, ha sido criticado por los padres de los niños asesinados, los líderes electos locales y otros funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Todos afirman que Arredondo no siguió el entrenamiento y retrasó indebidamente durante más de una hora la entrada al salón de clases donde los agentes finalmente mataron al atacante. Agentes armados de varias agencias se arremolinaron mientras el hombre armado se movía libremente por las aulas contiguas, según muestra el video publicado por el diario local Austin American-Statesman.
Arredondo, quien dijo que no se consideraba a sí mismo el comandante durante el incidente ni instruyó a los agentes para que se abstuvieran de irrumpir en la escena, renunció al puesto en el Concejo Municipal de Uvalde, un cargo que había asumido solo una semana después del ataque. Pero las repercusiones formales para él, y cualquier otro de al menos ocho agencias involucradas en la respuesta policial, siguen siendo esquivas.
Consecuencias
Las consecuencias pueden ser penales, administrativas o civiles. Pero los diferentes estándares en cada una de estas jurisdicciones y las reglas contradictorias que rigen las investigaciones reflejan "un problema persistente en la responsabilidad policial", dijo Seth Stoughton, profesor de derecho en la Universidad de Carolina del Sur.
"No es solo este caso, es en muchos casos". Las prioridades en competencia, dijo, podrían enfrentar si es "más importante descubrir qué sucedió o cómo evitarlo en el futuro. O hacer que un agente sea individualmente responsable de alguna manera, ya sea penal o civilmente. (Las competencias) Pueden chocar entre ellas".
El Departamento de Seguridad Pública de Texas también está investigando el ataque en la Escuela Primaria Robb. Pero públicamente, al menos, no está claro con precisión en qué facetas del incidente está profundizando y qué estándares está tratando de mantener, por no hablar de lo que podría arrojar la investigación.
Fuente: CNN