La salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) afectará a la economía de la República de Irlanda durante los próximos cinco años, advirtió un informe del Instituto de Investigaciones Sociales y Económicas (ESRI).
El estudio de este "think-tank" irlandés anticipa una ralentización en el crecimiento de la economía de este país y de la isla de Irlanda en general, pues apunta que la provincia británica de Irlanda del Norte será la zona más afectada por el "brexit".
El responsable del documento, Kieran McQuinn, indicó que la inversión de firmas británicas en Irlanda ha caído en los últimos meses, al mismo tiempo que los sectores con lazos comerciales entre el sur y el norte de la isla, como la agricultura o alimentación, serán los más perjudicados.
También sufrirá, apuntó el experto, el turismo procedente del Reino Unido por la depreciación de la libra esterlina ante el euro.
"Sin duda, habrá oportunidades. Pero si se tiene en cuenta el efecto global del ‘brexit’, la economía irlandesa probablemente crecerá a un ritmo menor durante los próximos cuatro o cinco años que el previsto si el Reino Unido hubiese permanecido en la UE", señaló McQuinn.
En este contexto, ESRI ha revisado sus previsiones y sitúa ahora el crecimiento del producto interior bruto (PIB) irlandés en 2016 en torno al 4,3 %, un 1,2 % menos que en 2015, mientras que en 2017 caería al 4 %.
También continuarán mejorando las cifras del paro, que bajó en agosto al 8,3 %, si bien el desempleo caerá a un ritmo menor como consecuencia del "brexit", agregó McQuinn.
El Gobierno de Dublín, liderado en minoría por el conservador Fine Gael, considera el informe de ESRI como una guía de cara a la elaboración de los presupuestos generales del Estado, que presentará el próximo 11 de octubre.
El "think-tank" prevé que la economía nacional podría dejar de ingresar hasta 3.000 millones de euros este año por una caída de en torno al 20 % del comercio en la República de Irlanda e Irlanda del Norte.
En el lado positivo para Irlanda, destacó Mr McQuinn, el "brexit" tendrá consecuencias sobre la City de Londres y su sector financiero.
"Obviamente, se podrían presentar oportunidades si algunas firmas deciden reubicarse y eligen Irlanda", dijo el economista.
Con información de EFE