El Gobierno brasileño autorizó hoy la presencia de refuerzos militares en áreas que concentran numerosos aficionados durante los Juegos Olímpicos inaugurados el pasado viernes en Río de Janeiro, como el turístico barrio de Copacabana y el centro de la ciudad.
La ampliación del área de participación militar en los planes de seguridad para los Juegos Olímpicos de 2016 fue solicitada por el gobierno regional de Río de Janeiro y autorizada en un decreto del presidente interino de Brasil, Michel Temer, publicado hoy en una edición extra del Diario Oficial.
Además de la Avenida Atlántica, la vía que bordea la playa de Copacabana, y de otras áreas en el barrio más emblemático de Río de Janeiro, los militares también reforzarán la vigilancia en el aeropuerto Santos Dumont, en el parque del Aterro de Flamengo y en el centro de la ciudad, cuyo puerto totalmente revitalizado es uno de los principales legados de los Juegos Olímpicos.
Copacabana alberga las competiciones de voleibol playa, triatlón y maratón acuática, y el sábado y domingo fue el punto de partida y la meta de las pruebas de ciclismo por carretera masculino y femenino.
El Boulevard Olímpico, como ha sido bautizado el amplio paseo marítimo que le dio nueva vida al centro de Río de Janeiro y que incluye atracciones como el Museo del Mañana, un proyecto del arquitecto español Santiago Calatrava, se ha convertido en el principal lugar de concentración de aficionados debido a que fue equipado con pantallas gigantes, palcos para conciertos y otras atracciones.
El gobernador de Río de Janeiro, Francisco Dornelles, pidió los refuerzos militares tras admitir que las fuerzas policiales se han mostrado insuficientes para garantizar la seguridad en los lugares de amplia concentración de público.
Con información de EFE