El asesor especial de la presidencia de Brasil, Celso Amorim, afirmó este jueves que la exclusión de Venezuela del grupo BRICS no se debió a razones políticas, sino a un “quiebre de confianza” con el régimen de Nicolás Maduro.
Según explicó Amorim, el régimen chavista incumplió una promesa clave, lo que resultó en la decisión de Brasil de bloquear la entrada de Venezuela en la organización durante la cumbre celebrada en Kazan, Rusia.
“Nosotros actuamos de buena fe, pero con Venezuela se rompió la confianza”, agregó.
Los detalles
Amorim también destacó el deseo de Brasil de “volver a tener confianza” en Venezuela, aunque señaló que por el momento, la postura brasileña fue determinante para frenar la entrada del país al BRICS.
A pesar del apoyo de Rusia y China a la incorporación de Venezuela, ambos países respetaron la decisión de Brasil, que consideró “inoportuna” la adhesión de la nación sudamericana al bloque.
El fracaso diplomático de Maduro en Kazan fue evidente, según fuentes de la delegación brasileña. Además de no lograr la inclusión de Venezuela en la lista de nuevos socios del BRICS, Maduro no fue autorizado a participar en la foto oficial del evento, lo que fue considerado un duro revés para su régimen.
La relación entre Brasil y Venezuela está en uno de sus peores momentos. Según fuentes del gobierno brasileño citadas por O Globo, Lula ha perdido la paciencia con Maduro y, a partir del 10 de enero, cuando se inaugure el nuevo mandato presidencial en Venezuela, Brasil dejará de reconocer a Maduro como jefe de Estado. Aunque no se espera una ruptura total, sí habrá un “profundo enfriamiento” en las relaciones entre ambos países.