Extender, por lo menos seis meses más, su estadía en el estado de Florida, es el plan que maneja a muy corto plazo el expresidente del Brasil, Jair Bolsonaro.
El Político
El expresidente ha decidido permanecer más tiempo en la ciudad de Orlando, en el centro del estado; unos seis meses como mínimo.
Mientras tanto, en Brasil, las autoridades recién electas lo investigan por presuntas irregularidades, entre ellas si inspiró a sus partidarios a asaltar edificios gubernamentales en Brasilia.
Solo en Tampa
Felipe Alexandre, cofundador del bufete de abogados AG Immigration, dijo en un comunicado que está representando a Bolsonaro en su solicitud de visado y que el capitán del ejército del Brasil, quiere permanecer en Estados Unidos durante al menos otros seis meses.
Bolsonaro posee un visado diplomático A-1, reservado a diplomáticos y jefes de Estado.
Bolsonaro se marchó de Brasil a Florida a finales de diciembre tras perder la reelección frente a su rival, Luiz Inácio Lula da Silva y se ha alojado en una casa cerca de Disney World en Orlando.
Fans y simpatizantes han esperado con frecuencia fuera de su residencia en el área de Orlando para echarle un vistazo o saludarle con comida y palabras de elogio.
También se le ha visto paseando por un supermercado local y comiendo en un KFC, lo que ha desatado bromas en Twitter.
El asalto en enero
A principios de enero, miles de partidarios de Bolsonaro asaltaron edificios gubernamentales en Brasil para protestar por los resultados de las elecciones de octubre.
La escena fue inquietantemente similar a los disturbios del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos.
A raíz de las protestas brasileñas, algunos legisladores estadounidenses pidieron la expulsión de Bolsonaro de Estados Unidos.
Parlamentarios piden su expulsión
Los representantes. Alexandria Ocasio-Cortez (demócrata de Nueva York) y Joaquín Castro (demócrata de Texas) pidieron al gobierno de Biden que echara a Bolsonaro del país, mientras que el senador Tim Kaine (demócrata de Virginia) dijo que Estados Unidos debería cumplir con cualquier solicitud válida de extradición para devolver al ex presidente brasileño.
En una carta fechada el 12 de enero al presidente Joe Biden, casi 50 miembros de la Cámara de Representantes de Estados Unidos pidieron al presidente que examine si Bolsonaro puede permanecer legítimamente en el país. Los legisladores también pidieron a Biden que impida que Bolsonaro se refugie en los EEUU.
"Su tráfico de desinformación, su fracaso a la hora de pedir a sus partidarios que acepten los resultados de las elecciones y sus llamamientos activos a movilizarse contra las instituciones democráticas incitaron a miles de manifestantes a asaltar edificios gubernamentales y a participar en los actos violentos del 8 de enero contra los pilares de la democracia de Brasil", afirmaba la carta.