Las remesas generan tensión entre Cuba y Estados Unidos. Un día después de que el país del norte modificara las regulaciones para el envío de remesas a la isla, esta acusa a Washington de jugar con las necesidades de las familias.
El Político
Los cubanos manifestaron el miércoles su preocupación por el potencial cierre de Western Union. Las nuevas restricciones para el envío de remesas a Cuba fue la última piedra en el zapato colocada por la administración del presidente Donald Trump al régimen castrista. Como lo hizo en medio de la campaña para su reelección, sus detractores y voceros del gobierno cubano lo acusan de tratar de congraciarse con los votantes cubanos exiliados en Florida.
Las sucursales de la empresa estadounidense Western Union en Cuba amanecieron con las puertas abiertas. Pero muchos usuarios se preguntaban cómo harán para recibir el dinero de familiares y amigos para llegar a fin de mes. Por eso, las remesas generan tensión entre Cuba y Estados Unidos.
Remesas esenciales para la sobreviviencia
“Independientemente de toda la política pido que se piense en las personas”, dijo a The Associated Press Daynela Pupo, quien arrienda su vivienda y compensó con las remesas la ausencia de turistas por la pandemia del nuevo coronavirus, reseña El Nuevo Herald.
Reynier Pérez, desempleado de 41 años, también se lamentó. “Ahora mismo estoy viviendo de lo que me manda la familia, las amistades”.
Cortan flujo de dinero a Fincimex
La semana pasada el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, había dicho que el objetivo de la medida era cortar el flujo de dinero que pasa por los uniformados cubanos. Acusó a los militares de violar sistemáticamente los derechos humanos y apoyar al régimen de Venezuela.
El gobierno estadounidense colocó en una lista negra a Fincimex, un conglomerado de empresas militares cubanas que opera el dinero enviado a Cuba y que tiene un convenio con Western Union desde hace dos décadas.
“Recae en el gobierno norteamericano la responsabilidad por la interrupción del servicio de remesas entre los dos países”, dijo el conglomerado financiero militar en un comunicado el martes por la noche. Una evidencia más de que las remesas generan tensión entre Cuba y Estados Unidos.
Sin embargo, el economista cubano Emilio Morales, declaró que “el anuncio que hizo Fincimex, de que van a cerrar todas las ventanillas de Western Union es puro humo, porque no han cerrado ni una. Lo que están es tratando de politizar el asunto e influir en las elecciones de EEUU, tratando de desviar los votos de Trump hacia Biden. No es una sorpresa”.
Sin Western Union revive el mercado negro de divisas
Aunque no hay una cifra oficial de las remesas que llegan a Cuba, pues el Estado nos las declara, los expertos estiman que rondarían los 3.500 millones de dólares anuales.
Western Union aseguró, en un comunicado enviado a AP este miércoles, que está “explorando formas de cumplir con las nuevas reglas y regulaciones sobre Cuba” para seguir brindando el servicio.
Una alternativa para el envío de remesas, podría ser un nuevo convenio entre Western Union y empresas estatales cubanas como Fincimex, pero formada por civiles. Esa fórmula es la que se usa con los envíos desde Europa y Canadá, que se canalizan a través del local Banco Metropolitano.
El economista cubano Omar Everleny Pérez, declaró a AP que el bloqueo "evidentemente crea molestias”, pero “en tiempos normales (sin las dificultades causadas por COVID-19) con que quiten la Western Union no pasa nada… hay otras alternativas”.
Pérez recordó que un número no desdeñable de remesas viene a través de "mulas" por lo que el retorno de los vuelos les abrirá el camino. Agregó que ya existen agencias que operan por vías no formales, cubriendo el mercado de remesas, y también hay bancos de terceros países.
Sanciones a la izquierda
Las presiones económicas del presidente estadounidense para forzar un cambio de modelo político en la isla han ido desde multas a empresas y listas de compañías con las que está prohibido operar, hasta restricciones a los viajes turísticos de estadounidenses a Cuba.
El gobierno de Cuba informó esta semana que en el último año perdió unos 5.500 millones de dólares debido a las sanciones de la administración Trump.