El 8 de noviembre, los estadounidenses celebrarán las ‘midterms’ para elegir la totalidad de la Cámara de Representantes y más de un tercio del Senado.
El Político
El presidente de EEUU, Joe Biden, quien entró en campaña el pasado 25 de agosto con un mitin en Rockville (Maryland), a las afueras de Washington, llega debilitado y podría perder su estrecha mayoría tanto en la Cámara como en el Senado, obligándolo a una situación de cohabitación con un poder legislativo opositor.
¿Por qué es importante?
Están en juego la línea política del Congreso, la capacidad del mandatario para gobernar y las futuras dinámicas de la campaña presidencial de 2024.
Estas elecciones permiten medir la temperatura del ambiente político en el país. Generalmente, desfavorecen al partido del presidente en el poder, ya que se sanciona el balance de sus dos primeros años de mandato
Tanto Biden como el expresidente Donald Trump, líder de hecho del Partido Republicano, han decidido intensificar su actividad en la última semana de la campaña de las elecciones legislativas del próximo 8 de noviembre, reportó ElPais.
Entre líneas
Si Biden ha acudido a tan pocos mítines es porque su popularidad es baja y en algunos Estados creen que su presencia junto a los candidatos locales puede resultar contraproducente.
Aun así, en esta última semana tiene previstos, además del mitin de Florida, actos de campaña en Washington, Nuevo México, California, Pensilvania y Virginia.
Para ese día el mandatario estadounidense tiene previsto un discurso que no estaba inicialmente agendado en el que abordará los riesgos para la democracia.
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Gran parte de los candidatos republicanos aún no reconoce la legitimidad de su victoria en las elecciones presidenciales de 2020 y algunos trumpistas hasta se han burlado de la agresión, la semana pasada, al marido de Nancy Pelosi en su casa de San Francisco.
En Pensilvania, el Estado que más ha visitado durante la campaña, competirá el sábado con otra convocatoria de Donald Trump, que además tiene programados mítines también en Iowa, Florida y Ohio.
En Florida, el expresidente competirá con otro mitin del gobernador, Ron DeSantis, que aspira a revalidar su mandato y que es percibido como un potencial rival de Trump para las elecciones presidenciales de 2024.
En conclusión
La tradición marca que las elecciones de mitad de mandato pasan factura al partido del presidente en el cargo y no parece que esta vaya a ser una excepción.
Los demócratas casi dan por perdida la Cámara Baja y se esfuerzan en retener la igualdad de 50 a 50 escaños en el Senado, que deshace la presidenta, Kamala Harris, a su favor.
Además, la inflación se ha ido imponiendo una vez más como el tema estrella de una campaña en que a los demócratas les ha costado encontrar el tono.
Se trata de uno de los temas que más preocupa a los estadounidenses. Por ello, Biden en agosto centró su discurso en las cosas que van bien, como la creación de empleo, la bajada de la tasa de paro, la vuelta al crecimiento de la economía o el auge de las exportaciones.
Our economy has created 10 million jobs, unemployment is near a 50-year low, and U.S. manufacturing is booming.
That’s how you build an economy that works for everyone. pic.twitter.com/OtjMCZE0ln
— President Biden (@POTUS) October 29, 2022
Biden se ha presentado como el valedor de los trabajadores y la clase media frente a un Partido Republicano que defiende a los ricos.
“Estas elecciones no son un referéndum. Es una elección. Es una elección entre dos visiones muy diferentes para América”, un mensaje en el que viene insistiendo en las últimas semanas. Las elecciones de mitad de mandato son percibidas tradicionalmente como un referéndum sobre el presidente.
Responsabilizó de los problemas económicos a la herencia recibida y a la guerra de Ucrania.
“Cuando asumí el cargo, la economía estaba en ruinas. Esto no se debe a mí, sino a lo que heredamos. Mi predecesor”, ha dicho evitando citar a Trump por su nombre, “fue el primer presidente desde Herbert Hoover [presidente de 1929 a 1933, en plena Gran Depresión] en perder empleos. Tenía menos puestos de trabajo cuando dejó el cargo que cuando llegó a él”, ha afirmado sin hacer referencia a la pandemia.
El presidente de EEUU también prometió regular el derecho al aborto en todo el país como ley si tiene mayoría suficiente (lo que parece improbable).
Además, advirtió que los republicanos podrían recortar beneficios sociales si ganan las elecciones.