El presidente Joe Biden calificó a la nueva variante Ómicron del Covid-19 como un motivo de preocupación pero "no un motivo de pánico".
El Político
A su vez indicó que no estaba considerando ningún bloqueo generalizado en Estados Unidos.
Instó a los estadounidenses de nuevo a vacunarse por completo, incluidas las vacunas de refuerzo. Y a volver a usar máscaras faciales en espacios interiores públicos para frenar la propagación.
Biden dijo que luce inevitable que la nueva variante Ómicron llegara a Estados Unidos. Pero también dijo que el país tiene las herramientas necesarias para proteger a los estadounidenses, en particular las vacunas aprobadas y las inyecciones de refuerzo.
"Cuando llegue Ómicron, y lo hará, Estados Unidos se enfrentará a esta nueva amenaza tal como nos hemos enfrentado a las que la precedieron".
Hizo un llamamiento a los aproximadamente 80 millones de estadounidenses no vacunados de 5 años en adelante para que se vacunen, y al resto del país para que busquen vacunas de refuerzo seis meses después de su segunda dosis. También alentó a todos a volver a usar máscaras faciales en todos los entornos públicos cerrados, una precaución contra la pandemia que ha dejado de usarse en gran parte del país.
Las infecciones han subrayado la dificultad de mantener el virus bajo control en un mundo globalizado de viajes en avión y fronteras abiertas. Sin embargo, muchos países están tratando de hacer precisamente eso, en contra de la insistencia de la OMS, que señaló que el cierre de fronteras a menudo tiene un efecto limitado y puede causar estragos en vidas y medios de subsistencia.
Algunos argumentaron que tales restricciones podrían proporcionar un tiempo valioso para analizar la nueva variante. Se sabe poco al respecto, incluso si es más contagioso, más propenso a causar enfermedades graves o más capaz de evadir las vacunas.
Fuente: AP News