La administración de Joe Biden anunció que no bloqueará la solicitud de información que hace la Cámara de Representantes sobre las comunicaciones de Donald Trump del pasado el 6 de enero, día del asalto al Capitolio.
El Político
Porque considera que no se justifica el uso del llamado ‘privilegio ejecutivo’ que el expresidente pide que se aplique para mantenerlas en secreto.
"El presidente ha determinado que no se justifica una afirmación del privilegio ejecutivo para el primer grupo de documentos de la Casa Blanca de Trump que nos han proporcionado los Archivos Nacionales", dijo el viernes la jefa de prensa de la presidencia, Jen Psaki a Univision.
Biden niega privilegio a Trump
"Evaluaremos las cuestiones de privilegio caso por caso, pero el presidente también ha dejado claro que cree que es de suma importancia para el Congreso y el pueblo estadounidense tener una comprensión completa de los eventos de ese día para evitar que vuelvan a ocurrir", afirmó la portavoz de Biden.
El privilegio ejecutivo es la figura que usa la administración para proteger comunicaciones del presidente con sus asesores y otros altos funcionarios con el fin de no exponer información que pueda ser dañina a la seguridad nacional o la conducción de los asuntos el Estado.
El equipo legal del expresidente Trump se ha movido para bloquear algunas de las solicitudes invocando el privilegio ejecutivo, que permite que los presidentes y sus asistentes eludan el escrutinio del Congreso.
Biden pidió investigación del 6 de enero
En este caso, el gobierno de Biden cree que debe tenerse acceso a lo que ocurrió dentro de la Casa Blanca de Trump el 6 de enero mientras hordas de seguidores del expresidente asaltaron el Capitoli, en momentos que en se cumplía el proceso protocolar de certificar los resultados de las e lecciones presidenciales de noviembre de 2020 que dieron ganador al candidato demócrata.
Poco antes, el entonces presidente Trump había dado un discurso a sus seguidores en el que les conminó a presentarse; ante la sede del Congreso para reclamar lo que calificaba (y sigue calificando) como un "fraude electoral". Esa actitud llevó a Trump a un segundo proceso de ‘impeachment’ en el Congreso. Y aunque se salvó de la sanción final en el Senado, el juicio político fue apoyado por varios miembros de su propio partido.
Con la decisión, la Casa Blanca autoriza a los Archivos Nacionales a entregar al Comité Selecto de la Cámara de Representantes; que investiga aquel episodio todos los documentos oficiales que detallen las acciones y comunicaciones que el expresidente tuvo durante la revuelta contra el Congreso.
Congresistas apuntan a Trump
La solicitud de los congresistas, presentada en agosto, busca desde mensajes de Twitter y declaraciones públicas; (que son parte del dominio colectivo) hasta el listado de llamadas telefónicas o visitantes de la Casa Blanca aquel día.
De acuerdo con varios medios, que citan fuentes conocedoras de proceso, los Archivos Nacionales han estado presentando información; a las partes (tanto representantes de Trump como de la actual Casa Blanca) desde el 8 de septiembre.
Los representantes de Trump habrían dicho que el expresidente buscaría ejercer el derecho ejecutivo en algunos de los documentos; pero que la Casa Blanca concluyó que el privilegio no se justifica para ninguno de los materiales.