La reunión sostenida entre funcionarios estadounidenses y representantes del régimen venezolano ha despertado opiniones encontradas, pero también muchas dudas y sospechas de que no se ha dicho toda la verdad en esas casi tres horas de reunión.
Mario Augusto Beroes Ríos/El Político
¿Realmente está el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sopesando la posibilidad de aliviar las sanciones a Venezuela para que el país pueda comenzar a producir más petróleo y venderlo en el mercado internacional?
Funcionarios de la administración de Biden, incluido el director del Consejo de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental, Juan González, y el enviado presidencial especial de EEUU para asuntos de rehenes, Roger Carstens, fueron enviados a Caracas durante el fin de semana.
Qué se conversó, qué temas tocaron y cuáles en profundidad nadie realmente lo sabe, más allá de los asistentes a la reunión que apenas duro algo más de tres horas.
Apoyo petrolero, aislar a Rusia, relajamiento de las sanciones económicas, liberación de ex directivos petroleros y el presunto mariner detenido en los calabozos del Digecim, reanudación de relaciones diplomáticas, reconocimiento al régimen de Maduro, reinicio de la Mesa de Diálogo en México…. De todo eso y más han podido conversar ambos bandos
Las sanciones a Venezuela
Washington impuso sanciones al petróleo venezolano en 2019 y cerró su embajada en Caracas después de considerar que la victoria electoral del presidente Nicolás Maduro en 2018 era una farsa.
En los últimos meses, el presidente Biden ha encargado a su administración que encuentre formas de reducir drásticamente la dependencia mundial del petróleo y el gas rusos, dijo la fuente, y aliviar las sanciones contra Venezuela es solo una de las ideas que están explorando.
Cuando se trata de Venezuela, los funcionarios creen que una mayor producción venezolana podría reemplazar una buena parte del suministro perdido al aislar a Rusia y facilitar que Estados Unidos y sus aliados prohíban las importaciones de petróleo ruso.
El problema es cómo lograr reactivar una producción inexistente. Y eso lo sabe estados Unidos, o debe saberlo
El senador republicano Marco Rubio ya criticó las discusiones y tuiteó durante el fin de semana que “en lugar de producir más petróleo estadounidense”, Biden “quiere reemplazar el petróleo que le compramos a un dictador asesino con petróleo de otro dictador asesino”.
Aumentar la producción de petróleo estadounidense no compensaría la cantidad perdida al aislar a Rusia.
El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo este domingo que Estados Unidos y sus aliados estaban explorando activamente formas de prohibir las importaciones de petróleo ruso, lo que dañaría aún más la economía de Rusia.
Occidente se ha mostrado reacio hasta ahora a imponer sanciones significativas al sector energético de Rusia debido a cómo podría impactar en la economía global, pero ahora está cada vez más cerca de hacerlo a medida que Europa trabaja para diversificar sus fuentes de energía.
Petróleo del Medio Oriente
Los funcionarios de Biden también están sopesando un posible viaje presidencial a Arabia Saudita en los próximos meses, confirmaron tres personas familiarizadas con las conversaciones, mientras Estados Unidos trabaja para apuntalar la relación con el Reino productor de petróleo.