La situación en la frontera de Ucrania parece un juego en el que cada uno de los participantes tiene una particular estrategia. Europa y Estados Unidos avisan permanentemente a Putin de que un ataque podrá tener "severas consecuencias".
El Político
Los rusos responden enviando más y más tropas a la zona y “amasando” según inteligencia de EE.UU. un total de 175.000 soldados para una posible invasión que podría iniciarse tras el año nuevo.
Aunque no está claro todavía que ésta se vaya a ejecutar.
Una de las opciones que baraja la Casa Blanca es que esa escalada de tropas sea simplemente una maniobra de Putin para lograr concesiones en otros puntos de su agenda.
Alarma en el G7, Putin juega a la candelita
El aumento de tropas rusas en la frontera con Ucrania ha hecho saltar todas las alarmas. La reunión de los ministros de Exteriores del G7 en Liverpool pretende dar una imagen de unidad ante el posible ataque de Rusia.
El encuentro virtual de Putin con el presidente Joe Biden no ha contribuido en nada a bajar las tensiones.
Rusia busca un acuerdo y "establecer unas zonas de influencia que eviten que Ucrania ingrese en la OTAN".
Putin quiera a Ucrania fuera de la OTAN
El acercamiento de Ucrania a la OTAN pone nervioso al Kremlin.
Todo aquello que suponga el acercamiento de estos países a Occidente es visto por Moscú como una puesta en marcha de una dinámica que es "forzosamente agresiva".
EEUU y la OTAN descartan una intervención militar y con eso es precisamente con lo que Putin está jugando. Esto envalentona al Kremlin. Sabe perfectamente que la Unión Europea, ni EEUU, ni la OTAN van a recurrir a la respuesta militar.
Porque ya ocurrió en 2014 con la península de Crimea, ocupada por Rusia desde entonces, o en la región de Donbass. Donde los enfrentamientos entre las fuerzas prorrusas y el ejército de Ucrania han aumentado en los últimos días.
LA OTAN exige a Rusia rebaje inmediatamente la tensión. Mientras que Putin hace oído sordos, y continúa caminando en la otra dirección.
Al parecer este jueguito continuará hasta que alguien cometa un desliz. Ojalá no sea después que empiecen los tiros.
Fuente: Agencias