El senador Bernie Sanders tiene dos grandes propuestas a nivel de educación superior en los Estados Unidos, la primera es que la universidad sea gratuita y la segunda es eliminar todas las deudas de los estudiantes.
Por Redacción El Político
El senador demócrata de 77 años ofrece además de que la Universidad sea gratuita, eliminar la deuda de todos los alumnos calculada en 1,6 billones de dólares, explicó vox.com.
En estos momentos unos 45 millones de ciudadanos de los Estados Unidos tienen préstamos estudiantiles, de llegar a ser una realidad lo planteado por Sanders, eliminaría la deuda de todas estas personas, independientemente de sus ingresos o activos.
Sanders también incluye en su propuesta flujos de fondos a los estados, colegios y universidades históricamente negros para que puedan suprimir los gastos de la matrícula y las cuotas a los alumnos de pregrado.
Asimismo este proyecto incrementaría el gasto en los planes de trabajo y estudio, en los programas de becas federales para estudiantes de bajos ingresos por costos adicionales relacionados con la educación, como compra de libros, vivienda y transporte.
Según el senador por Vermont, su propuesta educativa totalizaría unos 2.2 billones de dólares en una década, los cuales serían pagados con un impuesto a Wall Street. Ya en 2016, Sanders había planteado un impuesto de especulación a Wall Street en 2016, el cual incrementaría los impuestos por la compra y venta de acciones, bonos y derivados. Según los entendidos en el tema, ese planteamiento podría lograr la recaudación de cientos de miles de millones de dólares anualmente, detalló vox.com.
Lograr una educación superior gratuita es una de las características de Sanders al momento de hacer campaña por las primarias, de hecho afirma que los altos costos de las universidades es una " desgracia nacional " .
Ley del Colegio de Todos
La propuesta de Bernie Sanders plantea -gracias al programa de igualación de dólares de dos a uno- que el gobierno federal le de a los estados unos 48 mil millones de dólares anualmente, si suprimen las matrículas y cuotas en las universidades y colegios públicos.
Para obtener el financiamiento deben cumplir ciertas condiciones: Demostrar al Departamento de Educación que conservarán la educación superior y la ayuda financiera según las necesidades de las personas. Los estados deben probar que pueden cubrir el costo total de la educación superior para las familias más pobres, es decir quienes perciban menos de 25 mil dólares. Para las universidades tribales que tengan menos del 75% de inscripción de estudiantes de bajos ingresos (estudiantes elegibles para la Beca Pell), el gobierno federal cubrirá el 95% de los costos para eliminar la matrícula y las cuotas de las mismas, aseveró vox.com.
Entre las limitaciones que tendrá el financiamiento federal se encuentran que ese dinero no debe cancelar los salarios de los administradores, ni servir para ayuda financiera basada en méritos, o en la construcción de edificios no académicos, como estadios de fútbol.
El programa llegará a todos los alumnos -sin considerar su nivel financiero- aunque está orientado hacia los estudiantes de bajos recursos ya que se incrementaría el programa federal de becas Pell.
Los colegios y universidades históricamente negros y las Instituciones de Servicios a las Minorías también participarán en este financiamiento federal.
Según el senador por Vermont, el programa concedería unos 1.3 mil millones de dólares anualmente para bajar la matrícula y las tarifas en las universidades y colegios privados sin fines de lucro que tengan al menos el 35% de estudiantes que provengan de familias de bajos ingresos. Según el estudio que realizó Sanders unas 200 instituciones serían elegibles.
Otro aspecto que considera el planteamiento de Sanders es limitar las tasas de interés de los préstamos estudiantiles a la misma tasa que el gobierno federal paga por su deuda.
Este proyecto amplía la propuesta original de Sanders presentada en 2016 para la educación superior, ya que ahora plantea que no haya ni deuda ni matrícula al momento de inscribirse en una universidad.
Propuestas demócratas parecidas
La senadora demócrata por Massachusett, Elizabeth Warren, tiene una propuesta parecida a la de Sanders en el sector de educación superior.
Se diferencia en que el planteamiento de Warren busca mitigar la deuda de los estudiantes. Ofrece cancelar 50 mil dólares en deuda asumidas por los préstamos estudiantiles por cada persona con un ingreso familiar menor a 100 mil dólares, además afirma que realizará una "cancelación sustancial de la deuda" a cada ciudadano con ingresos familiares entre 100 mil dólares y 250 mil dólares. Las personas que perciban más de 250 mil dólares no calificarían en el programa.
Esta propuesta de Warren costaría 1.25 billones de dólares en diez años, es decir aproximadamente un billón menos que el planteamiento de Sanders.
Por su parte, el ex vicepresidente Joe Biden y la senadora por Minessota, Amy Klobuchar, plantean una universidad comunitaria de dos años. Se debe acotar que Biden estuvo de acuerdo en 2015 con cuatro años de universidad gratuita
Otros candidatos también están de acuerdo en bajar los costos a la educación universitaria. Eric Swalwell, representante de California aduce que debe haber préstamos estudiantiles federales sin intereses. El alcalde de South Bend, Pete Buttigieg, propone que exista una universidad sin matrícula ni deudas para los hogares de bajos recursos, y una universidad con una matrícula gratis para los hogares de ingresos medios.
Falta la opinión de los Estados
Estas propuestas de algunos candidatos demócratas por las primarias a las presidenciales del 2020 deberán contar con el apoyo de los diferentes estados para que sean una realidad, debido a que las universidades públicas estadounidenses son administradas por ellos.
Si Sanders y Warren desean que sus ideas sean una realidad debe contar con el apoyo de los estados, los cuales deberían firmar un acuerdo voluntario con el gobierno federal.
Estos planteamientos pueden tener detractores en los estados conservadores como ocurrió con la propuesta de desarrollo de Medicaid, la cual fue rechazada en esos lugares, a pesar de la propuesta de una conciliación federal más amplia.
Otros la critican porque creen que no debe ser gratuita la universidad para aquellos alumnos que puedan pagarla.
Sanders refuta ambos planteamientos, en el primero recuerda que hubo estados republicanos que aceptaron la propuesta de ampliar el Medicaid, y en cuanto al segundo afirma que no cree que personas con dinero rechacen estudiar gratuitamente.