Un avión de pasajeros ruso se vio obligado a desviarse para no colisionar con un avión de la OTAN cuando se dirigía a las islas Kuriles (océano Pacífico), informaron fuentes de los órganos seguridad.
“Se tomó la decisión de que el avión de pasajeros descendiera urgentemente para evitar una aproximación peligrosa o incluso una colisión aérea”, señaló la fuente a la agencia Interfax.
La nave rusa era un Bombardier que había despegado de la isla de Sajalín y se dirigía al archipiélago de las Kuriles, cuya soberanía es también reclamada por Japón. “La torre de control detectó que al avión se aproximaba a un aparato desconocido, que no respondía a las comunicaciones desde tierra”, apuntó.
Según la fuente, el aparato de la Alianza Atlántica penetró ilegalmente en el corredor por el que transcurría el vuelo del avión regional ruso a 6.000 metros de altura. El avión aliado nunca llegó a responder a las llamadas de los controladores rusos, que identificaron que pertenecía a la OTAN a través de sus señales de radio.
Con información de EFE