Al menos diez personas han sido detenidas y cinco resultaron heridas en Ámsterdam tras un violento ataque contra hinchas del equipo de fútbol israelí Maccabi Tel Aviv, que se encontraban en la ciudad para asistir a un partido contra el Ajax. Este incidente ha sido calificado por el presidente israelí como un "pogromo antisemita" y ha generado condenas tanto en Israel como en varios países europeos.
Los enfrentamientos ocurrieron la noche del 7 de noviembre, después del partido, cuando los aficionados israelíes fueron emboscados y atacados por manifestantes propalestinos en diferentes puntos de la ciudad. La policía local ha iniciado una investigación sobre estos incidentes violentos, que han sido descritos como una "explosión de violencia" contra los hinchas israelíes.
La embajada de Israel en Estados Unidos y el Ministerio de Relaciones Exteriores israelí confirmaron que al menos diez ciudadanos israelíes resultaron heridos, y se han compartido videos que muestran la violencia sufrida por los aficionados. En uno de los clips, se observa a un hombre siendo atacado mientras yace en el suelo.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha tomado medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos israelíes en los Países Bajos, incluyendo el despliegue de aviones para rescatar a los aficionados afectados. Además, se ha aconsejado a los israelíes en Ámsterdam que permanezcan en sus alojamientos y eviten mostrar símbolos judíos.
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Las tensiones ya estaban elevadas antes del partido, con informes de cánticos provocativos por parte de algunos hinchas del Maccabi Tel Aviv. Las autoridades holandesas han reforzado la seguridad en la ciudad y están trabajando para identificar a los responsables de los ataques.