La coalición de gobierno se resquebraja en Argentina. El desastre electoral del gobernante Frente de Todos en las primarias legislativas del domingo pasado parecen haber profundizado las diferencias entre el presidente Alberto Fernández, que responde a un ala más moderada del peronismo, y su vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, líder de la facción kirchnerista de la alianza.
El Político
Las renuncias el miércoles de cinco ministros y otros altos funcionarios ligadas al sector ‘K’ abrieron un escenario de inestabilidad en el Ejecutivo.
Y mientras el mandatario intenta sellar las goteras en la Casa Rosada, se encontró con una dura respuesta de su segunda en el mando, quien le reclama una respuesta más contundente tras el rechazo planteado por la ciudadanía en las urnas, reportó CNN.
Argentina con dilemas
El primero en manifestarse fue el presidente, a través de su cuenta de Twitter. En una serie de publicaciones, Alberto Fernández admitió que "la coalición de gobierno debe escuchar el mensaje de las urnas", pero pidió actuar con "responsabilidad" y defender "la unidad del Frente de Todos a partir del respeto que nos debemos".
“No es este el tiempo de plantear disputas que nos desvíen de [nuestro] camino” reafirmó el mandatario en su cuenta de Twitter. A la vez, pareció marcar la cancha ante las presiones de sus socios en el Ejecutivo: "La gestión de gobierno seguirá desarrollándose del modo que yo estime conveniente. Para eso fui elegido".
La coalición de gobierno debe escuchar el mensaje de las urnas y actuar con toda reesponsabilidad. Debemos hacerlo, y lo haremos, para asegurar que se satisfagan las necesidades de nuestro pueblo.
— Alberto Fernández (@alferdez) September 16, 2021
Cristina Fernández se expresó por Twitter
Tras los mensajes del jefe de Estado, Cristina Fernández de Kirchner publicó una extensa carta de respuesta, en la que se distinguió claramente de algunos ejes de las políticas del gobierno, y le pidió al presidente "honrar la voluntad del pueblo argentino", realizando cambios de funcionarios en su gabinete.
En referencia al fracaso electoral del domingo, la vicepresidenta lamentó que "al día siguiente de semejante catástrofe política, uno escuchaba a algunos funcionarios y parecía que en este país no había pasado nada, fingiendo normalidad y, sobre todo, atornillándose a los sillones”.
“¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al Presidente la reorganización de su gobierno?", agregó.
Aunque expresó su confianza en que Alberto Fernández "va a relanzar su gobierno", la vicepresidenta denunció ser víctima de "operaciones de prensa" que nacen "desde el propio entorno presidencial". En concreto, hizo referencia a las versiones de que había pedido la renuncia del ministro de Economía, Martín Guzmán. Negó haberlo hecho y contó que se comunicó con el dirigente para aclarárselo.
Como siempre… sinceramente. https://t.co/HGVqROXG1G
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) September 16, 2021
Fractura dentro del oficialismo
Los analistas interpretaron las renuncias de los altos funcionarios y ministros del Ejecutivo como una presión ejercida por el ala kirchnerista sobre el mandatario para que éste reforme el gabinete y se desprenda de algunos de sus colaboradores de mayor confianza, como el jefe de gabinete Santiago Cafiero.
El primer alto funcionario en presentar su renuncia el miércoles fue el ministro del Interior, Eduardo ‘Wado’ de Pedro, un aliado clave de Cristina Fernández de Kirchner. Tras él, varios otros hicieron lo mismo, provocando una crisis y exponiendo a la luz las brechas entre las facciones más moderadas y las del sector kirchnerista dentro de la coalición de gobierno.
De Pedro declaró que ofrecía su retirada para ayudar al gobierno a avanzar hacia la votación de mitad de período el próximo 14 de noviembre y recuperar el apoyo de los votantes, reportó France24.
Manifestaciones en las calles de Argentina
En el centro de Buenos Aires, manifestantes de izquierda opositores al gobierno marcharon en las calles este jueves, reportó Público.
"No sé por qué se sorprenden, se ve que no viven en los barrios de nuestros compañeros porque cualquiera lo podía ver, la indignación por la falta de trabajo y educación", dijo Eduardo Belliboni, integrante del Polo Obrero, una de las organizaciones que se movilizaron.
Belliboni añadió que cualquiera de las facciones que resulte ganadora de la pelea interna de la coalición oficialista, “el resultado será más ajuste”, y señaló que la marcha "no tiene nada que ver con la crisis política que se está desenvolviendo" y que la lucha de poder "no tiene nada que ver con las necesidades de la población".
La situación que atraviesa el Ejecutivo argentino alimentó una cantidad infinita de rumores en la prensa local en cuanto a la lucha de poder, mientras que el jefe de Estado recibió respaldo público por parte de varias autoridades.
"Agradezco el apoyo de gobernadores, de intendentes, de dirigentes del movimiento obrero y de la ciudadanía en estas horas", aseguró este jueves.