Andrés Manuel López Obrador (AMLO) trata de superar el estancamiento de su agenda energética, paralizada por los tribunales, con un nuevo impulso al sector de los hidrocarburos y a Pemex.
El Político
El objetivo del presidente mexicano es rescatar a la petrolera estatal, que arrastra una deuda de 100.000 millones de dólares, para lograr mayor autosuficiencia y romper con el modelo de las pasadas administraciones, que consistía en exportar crudo e importar combustible.
“Es el mejor negocio del mundo”, ha afirmado este miércoles el mandatario para defender la compra de una planta de Deer Park en Houston (Texas) por 600 millones de dólares, reportó El País.
El sueño petrolero de López Obrador se ha convertido una prioridad política irrenunciable, a pesar de que también esta refinería acumula una deuda de casi 1.000 millones.
AMLO trata de resurgir Pemex
El Gobierno y el partido que lo sostiene, Morena, han dedicado buena parte de este año a dos reformas que tienen el propósito de fortalecer a dos compañías del Estado, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Pemex, frente a la iniciativa privada.
El presidente hizo de la ley eléctrica y la de hidrocarburos una apuesta personal, defendiéndolas contra viento y marea pese a las repetidas advertencias sobre su impacto económico y ambiental.
Las iniciativas están ahora suspendidas por la justicia, que aceptó varios recursos de particulares para frenarlas, pero López Obrador no se ha dado por vencido.
De ese proyecto depende en buena medida la batalla por su idea de soberanía y la disputa ideológica con sus adversarios.
Planta de Deer Park
La adquisición del 100% de las acciones de la planta de Deer Park, cuya titularidad Pemex compartía con Shell, también ha generado dudas en torno a su sostenibilidad a largo plazo.
El mandatario, sin embargo, la ha presentado como un hito de la economía mexicana en tiempos de pandemia. “Yo les comento que la economía está muy bien en el país, nos estamos recuperando”, ha enfatizado al mismo tiempo que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informaba de una recuperación del 0,8% del PIB en el primer trimestre del año.
Sin embargo, ese dato supone también un desplome de casi un 3% respecto al mismo período de 2020.
AMLO presume no haber subido impuestos
“Les falló el pronóstico a nuestros adversarios, pensaban que nos iba a ir mal. Parece mentira, es increíble que apuesten, se enojen; porque está llegando inversión extranjera a México, nuestros adversarios están enojados. Hablan de que estamos inventando los datos. No. La economía de México está creciendo, nos funcionó la fórmula que aplicamos para enfrentar la crisis que se produjo con la pandemia; y el modelo de México es reconocido mundialmente”, ha llegado a decir el mandatario.
López Obrador presume de no haber subido impuestos o aplicados gasolinazos. Aun así, Hacienda ha reconocido que después de las elecciones federales y locales del 6 de junio el Gobierno tendrá que abordar una reforma fiscal.
“Tenemos finanzas públicas sanas, por eso se pudo hacer esta compra”, ha insistido López Obrador; que ha negado que esa operación suponga nuevas pérdidas para Pemex.