Cuando se le pregunta a Luis Almagro qué siente ante las críticas de sus "excompañeros" del MPP, él responde enseguida: "No son excompañeros. Son compañeros todavía. Yo no juzgo a los demás. Lo que sí sé es que en todas las convicciones sobre democracia y DDHH -que son los principales tema de la OEA- no he cambiado mi posición política y filosófica ni medio milímetro".
Él se sigue sintiendo frenteamplista y del MPP, pese a que el 22 de junio la Dirección Nacional del sector que lidera Mujica aprobó una resolución en la que considera que Almagro se "autoexcluyó".
Para el secretario general de la OEA eso no es así. "Yo considero que nunca me autoexcluí, por tanto me considero que estoy ahí. A todos le consta que nunca pedí un cargo ni nunca dijo quiero ser canciller. Sí defendí lo que hacía y mi posicionamiento político. Mañana estoy en el MPP sin aspirar a ningún cargo ni electivo o no electivo. Estoy tranquilo con las convicciones", dijo. En las últimas elecciones Almagro fue electo senador por el MPP.
La única crítica que deslizó a sus compañeros es que algunos priorizan la ideología por sobre la justicia en las valoraciones.
"Si uno mira mi actuación como canciller en democracia y DDHH, siempre actué así y con convicciones muy fuertes. No he cambiado. A veces sí me puede mortificar que puede haber compañeros que si el tema les resulta más cercano ideológicamente estén mas dispuestos a defenderlo. Yo creo que eso es un grave error. Tenemos que ser siempre coherentes con los principios y los valores. Evitar a toda costa de mirarlo según diferentes cristales dependiendo de si es más cercano o más lejano", dijo.
Dice que como canciller él nunca lo hizo y que si el gobierno adoptó medidas privilegiando lo ideológico él no estuvo de acuerdo.
Cuando el Mercosur decidió suspender a Paraguay y permitir luego el ingreso de Venezuela, él se opuso.
Con información de El Político