Elliott Abrams, enviado especial para Venezuela de Estados Unidos, confirmó este miércoles que funcionarios del régimen de Nicolás Maduro se han puesto en contacto con el gobierno de Donald Trump para ver en qué consiste el plan de transición para Venezuela presentado hace dos semanas por el Departamento de Estado.
El Político
“Sabemos que hay gente alrededor del régimen preguntando a Estados Unidos qué pasa con esto, qué pasa con lo otro”, dijo este miércoles Elliott Abrams en una videoconferencia con el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales de Washington.
Abrams señaló que también sabe de personas del régimen que “admiten que la situación del país está mal y que seguirá empeorando”.
Las palabras de Abrams ratifican lo dicho por el encargado de negocios de Estados Unidos en Venezuela, James Story, en entrevista con el canal TV Venezuela este martes.
Story afirmó: “Hay funcionarios del régimen que están revisando cómo pueden utilizar este proyecto como un punto de partida para que los venezolanos se sienten y conversen. Estamos dispuestos a apoyar un proceso 100% venezolano. Hemos recibido buenas noticias de quienes están dispuestos a pensar más cómo se puede lograr una transición política en Venezuela”.
Abrams: “El partido chavista que está en el gobierno está contemplado en el plan de transición. Nos parece razonable. Ellos pueden competir en unas elecciones democráticas. Los reconoceremos si ganan”.
Para Estados Unidos el partido chavista, el PSUV, tiene que jugar un papel en el gobierno de transición. En este sentido, Elliott Abrams apuntó: “El partido chavista que está en el gobierno está contemplado en el plan de transición. Nos parece razonable. Ellos pueden competir en unas elecciones democráticas. Los reconoceremos si ganan”.
Ya Abrams, a mediados de abril de 2019, decía que el PSUV “debía tener un papel en la reconstrucción de Venezuela”. Incluso pedía a los “jóvenes chavistas” unirse al “debate libre” sobre el futuro democrático del país.
Lo que no contemplan EEUU ni Abrams es que Nicolás Maduro siga en el poder. El diplomático dijo que con Maduro en el Palacio de Miraflores no hay democracia ni transición posible.
Abrams apuntó que el gobierno de Donald Trump está dispuesto a negociar con el chavismo y con funcionarios del régimen -no con Maduro ni demás oficiales acusados por narcotráfico- las condiciones del plan de transición. A negociar, por ejemplo, la composición del Consejo de Estado.
Agregó que “existen millones de variaciones para establecer el Consejo de Estado. El punto es tener una plataforma de regresar a la democracia y levantar las sanciones estadounidenses. Supongo que nos dirán que no estamos de acuerdo con esto, con lo otro, esto puede ser plausible”.
Abrams explicó que los nuevos movimientos de Estados Unidos en Venezuela no están motivados por el coronavirus. Dijo que forman parte de un plan en vista de que Maduro ha seguido reprimiendo a diputados de la Asamblea Nacional y funcionarios del entorno de Juan Guaidó. “Es la continuidad de nuestras políticas”.
Políticas que como dijo Abrams en la conferencia, no avistan una solución inmediata para Venezuela. Un país para el que no existe “una fórmula mágica”, ni tampoco es realista pensar que “Estados Unidos resuelva el problema de hoy para mañana”.
Respecto a la potencial amenaza del coronavirus en Venezuela, Abrams insistió en que la situación “en Venezuela es cada día peor” y que “las condiciones del sistema médico son terribles”. A esto le sumó la delicada situación del sistema petrolero y el desplome de los precios.
Abrams negó que las sanciones de Estados Unidos impidan al régimen la adquisición de material médico o insumos humanitarios. “Se puede adquirir material médico de Estados Unidos. Medicinas, materiales… Los bancos o las compañías que los necesiten sólo tienen que ponerse en contacto con el Departamento del Tesoro”.
Por otro lado, el diplomático recordó que “no habrá solución a la crisis humanitaria que padece Venezuela hasta que los venezolanos recuperen la democracia y la libertad”.
Fuente: Alnavio