El ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, denunció este martes en Ankara que la avalancha de detenciones y despidos iniciada por el Gobierno turco “hace tiempo que ya no se limita a la persecución de los responsables del fallido intento de golpe de Estado” del pasado julio.
En un comunicado emitido al final de su vista oficial a Turquía, el político socialdemócrata insistió en las críticas que ya había vertido por la mañana de este martes en presencia de su homólogo turco, Mevlüt Çavusoglu.
“Las medidas contra los diputados de la oposición, la sociedad civil, los periódicos, radios y emisoras de televisión e incontables profesores y funcionarios, no se corresponden, por mucho, con nuestros estándares del Estado de derecho”, afirmó Steinmeier en su nota.
El jefe de la diplomacia alemana, que se encontró este martes también con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, reconoció que, tal y como esperaba, “las conversaciones de hoy (martes) fueron difíciles” y que las diferencias entre los dos Gobiernos no pueden solventarse “con una visita y un par de charlas”.
Con todo, afirmó que la visita ha servido para poder hacerse una idea de la situación en el país y para contactar con la oposición y representantes de la sociedad civil.
Además, insistió en la disposición de Berlín de volver a colaborar con Turquía de forma estrecha.
“La oferta está ahí. Es el Gobierno turco el que debe decidir en último término”, manifestó el ministro.
Durante la rueda de prensa conjunta con Çavusoglu, el ministro alemán ya había rechazado la idea de suspender las negociaciones de acceso de Turquía a la Unión Europea (UE) y respaldó que sigan los contactos.
“La decisión de acercarse a la Unión Europea o alejarse de ella la deben tomar los turcos”, había dicho Steinmeier.
La visita del jefe de la diplomacia alemana se ha producido en un momento de tensión entre los dos países.
Mientras Alemania ha manifestado su preocupación por la situación de los derechos humanos en Turquía, Ankara acusa a Berlín de dar cobijo a terroristas kurdos y a seguidores del predicador islamista Fethullah Gülen, al que acusa de orquestar la asonada golpista.
“No puedo entender estas afirmaciones de que Alemania alberga a terroristas”, respondió el ministro germano, recordando que el PKK, la guerrilla kurda, es ilegal en su país y está sujeta a persecución judicial.
Con información de EFE