El gobierno alemán adoptó este miércoles un decreto para reforzar las reglas sobre inversiones extranjeras en sus empresas consideradas estratégicas, en un contexto de desconfianza de las inversiones chinas en Europa.
"Seguimos siendo una de las economías más abiertas del mundo pero también velamos porque las condiciones de la competencia sigan siendo justas", dijo la ministra de Economía socialdemócrata Brigitte Zypries en un comunicado.
El gobierno alemán quiere prorrogar de dos a cuatro los meses para estudiar las ofertas de compra de empresas de fuera de la Unión Europea (UE).
En particular, aquellas en sectores estratégicos como las redes eléctricas, las centrales nucleares, el suministro de agua, las redes de telecomunicaciones, los hospitales o los aeropuertos.
El decreto tiene el objetivo de "adaptar las modalidades de los procesos de examen al creciente número de compras de empresas, que cada vez son más complejas", explica el ministro de Economía.
Aunque no se cita ningún país en particular, China está en lo alto de la lista, en un contexto de preocupación por el "expansionismo chino", en palabras de la canciller alemana Angela Merkel.
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A nivel de la Unión Europea, Alemania apoyó la propuesta del presidente francés Emmanuel Macron de dar más poder a Bruselas para controlar las adquisiciones extranjeras en la Unión Europea y proteger así los sectores estratégicos.
Sin embargo esta idea no gusta a países de al UE como Portugal, Grecia o España, que temen que frene las inversiones chinas en sus economías.
AFP
